La composición de las baterías que usamos constantemente y a diario está en el centro de la polémica. ¿La razón? la mayoría usan como compuesto principal el cobalto, un metal difícil de explotar en países del Africa y han causado miles de muerte en esa región por su explotación en las minas.
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Ahora la división de investigación del gigante tecnológico, IBM, informó haber dado un gran paso en esa dirección, con el desarrollo de un nuevo tipo de batería que no usa metales pesados, como el peligroso cobalto.
Según IBM, los materiales usados para la fabricación de baterías “más ecológicas” se pueden extraer directamente del agua marina. Los elementos son de material catódico libre.
IBM afirmó que el diseño de batería no precisa de cobalto ni níquel como cátodo, además de conseguir un electrolito líquido seguro.
Cinco minutos para cargarla
Indicaron que ya cuentan con un prototipo de batería y ha demostrado un gran potencial. De hecho, señaló la empresa que este tipo de batería se recargaría más rápido que una tradicional, necesitando apenas cinco minutos para alcanzar el 80% de carga, sin comprometer la capacidad.
Se conoció que las baterías son metales pesados son de alta densidad, superando los 10.000 W/L y los 800 Wh/L, comparable o incluso superando a baterías de ion de litio actuales. Igualmente, las mismas tienen menos flamabilidad.
IBM estimó que las nuevas baterías pueden tener innumerables beneficios para los futuros vehículos eléctricos de menor precio y con carga rápida; incluyendo aviones eléctricos y hasta las computadoras portátiles.
Ayuda de la inteligencia artificial
Para llevar esta nueva batería de la etapa temprana de investigación al desarrollo comercial, IBM se ha unido al departamento de Investigación y Desarrollo de Mercedes-Benz en Norteamérica, Central Glass (uno de los proveedores principales de electrolitos para baterías en el mundo), y Sidius (fabricante de baterías), para crear un ecosistema de desarrollo de baterías de nueva generación.
Avanzando más, el equipo también ha implementado una técnica de inteligencia artificial (IA) llamada enriquecimiento semántico, esto con el objetivo de mejorar el desempeño de las baterías al identificar materiales más seguros y de mejor desempeño.
La investigación podría ayudar a eliminar la necesidad del uso de metales pesados en la producción de baterías y transformar la sustentabilidad a largo plazo de muchos elementos en la infraestructura energética a nivel mundial.