Australia ha sido el foco de atención durante las últimas semanas por los graves incendios forestales que la han afectado, pero ahora se suman otras situaciones climáticas que mantienen la preocupación de los expertos.
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Durante la última semana el país ha recibido inundaciones, tormentas con granizos del porte de una pelota de golf y más recientemente una tormenta de arena gigante que oscureció todo a su paso.
Aunque la lluvia supuso un respiro para los incendios que actualmente siguen siendo la preocupación principal en la zona, el clima no da tregua y continúa afectando con fenómenos extremos en la zona.
Australia y clima sin tregua
Las fuertes tormentas de granizo abatieron la costa oriental del país este lunes, mientras que la gigantesca y apocalíptica tormenta de arena y polvo abatieron la zonas que principalmente han sido afectadas por la sequía, además de los eventos de incendios que consumen el país desde el pasado mes de septiembre.
Hasta la fecha, ya van más de 10 millones de hectáreas consumidas por los incendios en los que han fallecido 29 personas, además de de millones de animales. Por si fuera poco, también se han registrado la destrucción de 2 mil casas.
Los servicios de emergencia en la zona han pedido encarecidamente a la población que retiren los vehículos que se encuentran estacionados en la calle y que además los alejen de todos los cables eléctricos, debido al peligro de esta situación.
Es más, el Servicio meteorológico local advirtió a todos los habitantes en la ciudad de Sydney que estén preparados porque se avecinan más tormentas en la zona, que pertenece al estado de Nueva Gales del Sur.
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Australia «apocalíptica»
La advertencia oficial fue la siguiente «Se prevén fuertes tormentas que pueden producir daños, vientos destructores, posiblemente gigantes tormentas de granizo y además fuertes lluvias las cuales pueden traer inundaciones durante las próximas horas».
En las últimas horas, un joven de 16 años quien se encontraba realizando excursiones en las Montañas Azules, fue alcanzado por un rayo, dejándolo herido y además afectando a su amigo de 24 años, quien en ese momento se encontraba apoyado en una barandilla metálica.
Sin embargo, una de las imágenes que más impresión causo y dio la vuelta al mundo fue la tormenta de polvo y arena que afectó la zona sur de Nueva Gales, donde los afectados afirmaron que se había puesto de noche cuando apenas se encontraban al medio día.
La localidad de Victoria también fue afectada, pero por enormes tormentas de granizo durante la tarde de este domingo. Según los afectados, el tamaño de las «rocas» de hielo era similar a pelotas de golf y tenis las que causaron daños principalmente en autos y techos.
Finalmente, el Gobierno anunció un nuevo plan con el cual inyectarán US$76 millones de dólares australianos (USD$52 millones) con el que esperan ayudar a incentivar el sector turístico, el cual se ha visto afectado con las recientes inclemencias del tiempo.
