Físicos de la Universidad Federal Báltica Immanuel Kant (IKBFU), en Rusia, propusieron recientemente una visión completamente nueva del cosmos. La investigación presenta la extraña idea de que la realidad que vivimos en la actualidad en una “simulación” por computadora. En otras palabras: Todo nuestro universo es parte de un sistema cuántico inmensamente grande que abarca “incontable” multiversos.
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Los sistemas cuánticos, como las computadoras cuánticas de IBM y Google, generalmente están diseñados para trabajar con partículas subatómicas, qubits y para realizar cálculos.
Esas súper computadoras pueden algún día investigar la brecha entre la realidad clásica y la cuántica.
Somos un objeto cuántico
Artyam Yurov y Valerian Yurov, los investigadores de IKBFU detrás del estudio, postulan que todo en el universo, incluido el universo mismo, debe verse como un objeto cuántico. Esto significa que para experimentar la “realidad cuántica” no necesitamos mirar partículas subatómicas o qubits: ya estamos allí. ¿La razón? ¡Todo es cuántico! e intangible.
“Presentamos una nueva perspectiva de la cosmología, basada en el modelo cuántico propuesto por Michael y Hall. En la continuación de la idea de ese modelo, consideramos finitamente muchos universos clásicos homogéneos e isotrópicos cuyas evoluciones están determinadas por las ecuaciones estándar de Einstein-Friedmann, pero que también interactúan entre sí cuánticamente”, aseguraron Artyam Yurov y Valerian Yurov.
Los físicos insisten en que nuestro universo entero es, en sí mismo, un objeto cuántico.
Engranajes de una gran máquina
Ellos postulan que teóricamente, nuestro universo debería poder estar en más de un lugar o estado a la vez, y eso significa que simplemente puede estar en múltiples estados simultáneamente.
Y qué papel juegan los seres humanos en este universo cuántico. Aquí la respuesta de Artyam Yurov y Valerian Yurov: “Los humanos podrían ser los observadores mágicos que hacen que el universo cuántico no colapse en la realidad clásica al medirlo. Podríamos ser engranajes en la máquina; tal vez el universo es un qubit, tal vez somos los qubits. Quizás solo somos ruido que los universos ignoran mientras realizan sus cálculos. Somos criaturas avanzadas, somos fragmentos de matemáticas que ayudan al sistema operativo a funcionar”.