Hay muchas cosas en la vida que no deberías hacer, y definitivamente vomitar en la calle es una de ellas. Especialmente cuando no estás completamente en vía pública y te encuentras a bordo de un Uber. Sí, está mal hacerlo por educación, pero también por economía. No sale nada barato.
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No vomites en un Uber, por favor
Primero, el conductor no se merece esto, y segundo, puede salir caro. En ocasiones la borrachera nos hace dejar de pensar con claridad, además de que vomitar es más una decisión fisiológica que consciente, pero si no quieres una cruda mora y económica, sigue leyendo.
El servicio de transporte sí puede hacerte un cargo extra (de hecho lo hará) por cuota de limpieza del vehículo en caso de vómito, derrames o algunas otras cosas que preferimos no imaginarnos. Los costos van entre 300 y 1,500 pesos dependiendo del caos que hayas generado en el automóvil. Aunque usualmente se cobra la cuota máxima de 1,500 pesos.
Si este cargo es generado, la compañía te enviará un correo explicándote lo que ha sucedido y cuánto has pagado (el cobro se hace automático, no te preguntan). Aunque uno de los más grandes problemas es que algunos conductores han aprovechado esto para crear lo que se llama como la «estafa del vómito»: fabrican evidencia y hacen que la app te cobre extra.
De todo hay en el mundo, pero te sugerimos evitar un dolor de cabeza para ti y para el conductor y mejor vomitar antes de abordar el auto.