No ha pasado ni una semana desde la predicción de Intel sobre laptops plegables, y Lenovo ya está saliendo al mercado con la suya: en una reunión para medios escogidos, la marca presentó un prototipo de «tablet plegable» pero con un nombre conocido por todos: ThinkPad X1.
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Pero entonces, ¿Es un PC o una laptop? El prototipo, en palabras simples, es una tablet PC con Windows 10, con una pantalla OLED 2K de 13 pulgadas -16:9- la que se transforma en «dos» pantallas de 9,6 pulgadas -en 4:3- al estar plegada. Ambas pantallas pueden funcionar como un escritorio conjunto, o de manera independiente: la ‘inferior’ hace las veces de teclado o dispositivo de entrada.
Por supuesto la pantalla se dobla hacia adentro -sería muy raro que fuese al revés en un laptop- y la pantalla es parecida a lo que hemos visto en teléfonos doblables, con un plástico bastante flexible en vez de vidrio. Si a eso le sumamos las pequeñas protuberancias en las bisagras, nos cuesta hacernos una idea de cuánto puede durar, y si es mejor traerlo plegado o abierto por completo.
De todas formas, es cosa de mirar el nombre para sacar conclusiones: los que conocemos o hemos tenido un ThinkPad alguna vez sabemos que son sinónimo de durabilidad y calidad. De hecho, la compañía china lleva tres años desarrollando este dispositivo en secreto, probablemente a sabiendas del potencial avance del resto de las marcas.
El equipo también cuenta con soporte multitáctil y de lápiz -el prototipo tiene un lápiz que se fija magnéticamente al aparato- pero no tiene feedback háptico con el teclado en pantalla, lo que le quita esa sensación de corporalidad y nos saca de esa idea de estar golpeando una pantalla para escribir que es muy frustrante.
Lenovo tiene planes ambiciosos para el ThinkPad X1: tras las mejoras planeadas para el terminal, debería ser lanzado durante el 2020. Tal parece que Intel no miró en la vereda de enfrente.
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