Después de años de retrasos tenemos que Intel ha aprovechado Computex 2019 para lanzar su primera oleada de CPUs de 10 nm con la presentación de los procesadores Intel Core de 10a generación que llevan por nombre clave Ice Lake (vía TheVerge).
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Ice Lake
Estos nuevos procesadores que llegarán al mercado en junio tendrán un comienzo tranquilo ya que Intel solo presentó modelos de bajo consumo con TDPs de 9W, 15W y 28W equipados con 4 núcleos, 8 hilos y velocidades de 4.1GHz en modo turbo que van dirigidos a ordenadores portátiles, convertibles y ultraportátiles, por lo que tendremos que seguir esperando para los chips de mayor potencia.
Intel dice que tienen 30 diseños que llegarán con Ice Lake para la temporada navideña, así que aún restan algunos meses para poder probarlos.
Así que no esperen grandes diferencias de rendimiento en estos nuevos procesadores en comparación a lo que existe actualmente, de hecho Intel dice que el Ice Lake es un 18% más rápido en relación a los núcleos Skylake lanzados hace casi cuatro años.
Afortunadamente en el terreno del GPU la cosa mejora ya que se habla de que casi duplica el rendimiento del anterior, así que con la integración de Gen11 puede alcanzar 1.12 teraflops en coma flotante que permiten jugar a 1080p, aunque quedándose por debajo de los 60 cuadros por segundo.
Cabe mencionar que aunque el CPU Ice Lake es fabricado con el proceso de 10 nm, el chip PCH se sigue fabricando con tecnología de 14 nm, pero aún así hay espacio para integrar varios elementos.
Wi-Fi 6 y Thunderbolt 3
Un detalle que llama la atención de estos procesadores es que incluyen soporte para las tecnologías Thunderbolt 3 y Wi-Fi 6, aunque se menciona que se seguirán requiriendo componentes adicionales como un módulo de radio externo.
Proyecto Athena
Aprovechando los reflectores del evento, Intel también presentó más detalles del Proyecto Athena, su certificación que busca revolucionar el mercado de las portátiles.
La idea de Intel es que los fabricantes ofrezcan equipos que en realidad sean competentes y cumplan con lo que ofrecen, incluyendo buena autonomía, excelente rendimiento y que cuente con las opciones de conectividad necesarias.
Para esto se han aliado con diversos fabricantes como ASUS, Acer, HP, Samsung, Sharp, Lenovo, Dell y Microsoft para que ofrezcan equipos con la certificación de Athena, que deben tener las siguientes características como mínimo:
- Procesadores Core i5 o i7
- 8 GB de DRAM de doble canal
- 256 GB de almacenamiento SSD
- Más de 16 horas de autonomía al reproducir video
- Más de 9 horas en navegación web
- La capacidad de cargar 4 horas de batería en solo 30 minutos
- Conectividad WiFi 6 Gig+ y Thunderbolt 3
- Ingreso biométrico – lector de huellas/reconocimiento facial
- Pantallas táctiles de 12-15.x pulgadas a una resolución mínima de 1080p
- Teclado retroiluminado, touchpad de precisión
- Soporte para WinML
- Que regrese del modo Sleep en menos de 1 segundo
Así que después un 2018 duro para Intel, ahora finalmente han dado el primer paso en el terreno de los 10 nm y estaremos esperando con ansias los detalles del resto de la familia de procesadores de décima generación.