Dos años de cárcel recibió Jabob Burrel por vender Bitcoin falsos a través de un método de transmisión de dinero sin licencia. En total fueron cientos de miles de dolares en vendidos de forma ilegal de la criptomoneda por parte del joven, el cual a su corta edad tendrá que pagar el particular delito financiero tras la rejas.
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El joven, quien estuvo más de dos años bajo custodia sin fianza hasta que fue arrestado en agosto del año pasado, se declaro culpable el pasado 29 de octubre, recibiendo ahora su sentencia.
Burrel admitió haber operado intercambio de Bitcoin sin registrar de forma previa su negocio en la red. Además, también asumió su culpa en no adoptar los procedimientos necesarios impuestos contra el lavado de dinero impuestos por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
Bitcoin falsos
El joven sentenciado realizó publicidad falsa de su negocio a través de LocalBitcoins.com. Luego se comunicaba con los diversos clientes que se interesaban en su propuesta a través de mensajes de texto y correos electrónicos.
Los métodos de comunicación que utilizaba con sus clientes tenían que se cifrados, para así cuidar su seguridad y ser descubierto. Se estima que el total de dinero ganado por Burrel equivale a USD$ 823.357 miles de dólares.
Según palabras de David Shaw, agente especial a cargo de las investigaciones «Le sentencia que recibió hoy Burrel es un recordatorio para los que transmiten dinero sin licencia de que las leyes y reglas se aplican en las transacciones de monedas criptográfica» .
Proceso de la estafa
El propio Burrel compro, en principio, un suministro inicial de Bitcoin utilizando un intercambio regulado con la sede en EEUU. Sin embargo, con el tiempo su cuenta cerró debido a un gran volumen de operaciones sospechosas.
Fue por esta razón que Burrel cambió de sede, realizando intercambio de criptomonedas desde Hong kong, lugar donde adquirió más de $3.29 millones de bitcoin. Esto lo logró a través de diversas transacciones realizadas desde marzo de 2015 hasta 2017.
Posteriormente, el joven movió el ciberdinero a los Estados Unidos, donde logró intercambiarlo para después almacenarlo en Mèxico. Es más, dentro de su declaración Burrel asumió que entre los años 2016 y 2018 se importó una alta cantidad de dinero por sobre lo que la ley norteamericana permitía, motivo por el cual su condena tendrá que cumplirla en la cárcel.