Exoplaneta es estudiado por científicos combinando cuatro diferentes telescopios

Un exoplaneta descubierto en el año 2010 conocido como HR 8799 fue observado por primera vez en detalle por un grupo de astrónomos gracias a la técnica denominada interferometría óptica. Su particular mecanismo funciona al juntar cuatro diferentes telescopios para así mejorar la calidad de la imagen obtenida por las científicos. El lejano planeta se encuentra a una distancia de 129 años luz de la Tierra.

El llamativo método de observación  consiste en combinar las señales luminosas proporcionadas por cuatro telescopios diferentes. Con esto, los expertos pudieron obtener imágenes 10 veces más nítidas y detalladas del lugar, en comparación con antiguos registros analizados.

El articulo fue publicado en la revista Astronomy & Astrophysics el pasado 27 de marzo, en en cual los expertos especifican todos los nuevos descubrimientos que se realizaron en el exoplaneta gracias al nuevo método de observación aplicado para los estudios.

Exoplaneta gaseoso similar a Júpiter

Los diversos datos recogidos fueron filtrados a través de un interferómetro, el cual tiene como función separar los haces de luz y medir las diferentes longitudes de onda producidas en cada telescopio.

Luego los analiza a través de una herramienta especial denominada «Gravity» que se encargará de combinar toda la información, otorgando así imágenes más nítidas las cuales posteriormente son estudiadas por los astrónomos.

A través del análisis el líder del equipo científico Sylvester Lacour señaló lo siguiente«Nuestras observaciones siguieren que hay una bola de gas gigante iluminado desde el interior del planeta» detallando además que «con rayos de luz cálida arremolinándose a través de áreas tormentosas de nubes oscuras».

Al parecer las diversas nubes de partículas formadas por hierro y silicato dentro del planeta, se desarman y llueven hacia el interior de este. Es por esto que la dinámica con la que actúa la atmósfera de este exoplaneta es similar a la del planeta Júpiter pero en mayor tamaño, ofreciendo así un ambiente hostil y complejo.

Esto provocaría que la temperatura registrada en el planeta sería similar a los 1.000 grados celsius en su atmósfera. Para los científicos, este importante método aplicado podrá ayudar a estudiar más exoplanetas registrados con un mayor detalle, ayudando así a resolver dudas sobre los misteriosos mundos similares al nuestro.