¿Creías que el artista Salvador Dalí había muerto el 23 de enero de 1989 a la edad de 84 años en su ciudad natal de Figueras, España? Tal vez ya no estés tan seguro de ese hecho después de ver la creación de cierta inteligencia artificial. ¿La razón? Pareciera que lo hubiera traído de vuelta a la vida.
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El Museo de Dalí de St. Petersburg, Florida, acaba de hacer algo increíble. Allí consiguieron que una inteligencia artificial lograra estudiar detalladamente la apariencia física de Salvador Dalí. No solo eso, sino que por medio de machine learning consiguió aprender cada una de sus típicas expresiones.
Después de haber hecho un extenso análisis, la IA logró hacer una imagen virtual de Salvador Dalí. Sin embargo, no es estática: puede moverse, hablar, hacer ademanes y dirigirse al público. A decir verdad la similitud física es muy exacta, tanto que se podría creer que el propio artista habría sido grabado 30 años atrás.
La imagen de Dalí también habla con un acento en inglés muy parecido al que tenía en vida. Si bien la voz difiere un poco de la original, se nota toda la personalidad del pintor en la creación.
Lo que pasó fue que una compañía llamada Goodby Silverstein & Partners tomó imágenes e hizo que su inteligencia artificial aprendiera cada detalle de su físico. Seguido de eso, pusieron su rostro encima del de un actor de movimientos. Así se dio un gran resultado que terminó publicado en el canal de youtube del Museo de Dalí.
¿Por qué hicieron esto?
Claramente los 30 años del fallecimiento del español representan una fecha más que oportuna para algo así. De todas formas el hecho no quedará solo con la recreación de la imagen, sino que servirá para educar al público que visita el museo.
Por ejemplo, la imagen de Dalí hablará sobre sus escritos y el proceso creativo de sus obras. Opinará sobre cosas que pasaron incluso después de su muerte. Prácticamente estará en las paredes del museo hablándole a los visitantes sobre él mismo.
Si bien esto es algo extraño, los directivos del museo argumentan de que Dalí estaría de acuerdo con el proyecto. Según el director ejecutivo Hank Hine, el artista estaba interesado en los medios de comunicación y tenía un «agudo sentido de su propio significado eterno». Sin duda, esta idea fue retratada en las palabras que dio su «avatar» cuando fue presentado al mundo:
Yo no creo en mi propia muerte, ¿tú sí?»