¿Por qué la canción infantil ‘Baby Shark’ es tan popular? La ciencia tiene la explicación

Si tienes hijos, sobrinos o algún tipo de interacción con niños, seguramente te habrás dado cuenta que han estado locos por una canción en particular. Se trata de ‘Baby Shark’, una composición infantil cuyo video en Youtube ya alcanzó los dos millones de vistas.

De hecho, hace poco ‘Baby Shark’ entró a la lista de los Hot 100 de Billboard. Estando entre las 100 canciones más populares en Estados Unidos, esta en específico alcanzó el puesto #32. Ante esto, cualquiera podría afirmar que esta es una de las canciones infantiles más exitosas de toda la historia.

¿Pero qué es lo que la hace tan entretenida tanto para niños como para adultos? Expertas en el tema explicaron cada una de las razones de la fama de Baby Shark (Vía TheDailyBest):

Las razones de su popularidad

Es repetitiva: Según Beatriz Ilari, profesora de la escuela de música de la Universidad del sur de Carolina Thornton que ha estudiado a detalle la música infantil, la simplicidad de la canción permite que niños con limitado vocabulario puedan encontrarle sentido.

Además, la repetición les permite aprendérsela y pronunciarla fácilmente. Por otro lado, la neurocientífica del Instituto Neurológico de Montreal Valorie Salimpoor explica que melodías pegajosas actúan sobre el sistema dopaminérgico del cerebro, donde generan placer y satisfacción. Este trabaja con el giro temporal superior, que almacena todos los sonidos previos que se han escuchado. Si una canción es notablemente mejor que estos sonidos anteriores, esta generará una gran descarga de dopamina.

Relaciona a la familia: El hecho de mencionar a un bebé, un padre, una madre y unos abuelos no es una coincidencia. Esto hace que genere relación con personajes y nombres con los que normalmente hay una relación positiva. Al escuchar la canción se producen emociones y se estimulan los sistemas de recompensa en el cerebro. Además, la letra es fácilmente adaptable para incluir otros miembro de la familia como los tíos. No solo eso, sino que ver a otros niños en pantalla hace que los pequeños se emocionen al estar obsesionados por comprenderse a ellos mismos.

Su ritmo: las expertas explican que la subida de velocidad es un importante recurso para contarles historias a los niños. «La parte rápida en la que los peces pequeños deben huir invita a los niños a moverse y bailar», señala Salimpoor. Esto también estimula los sistemas de dopamina y les hace querer sincronizarse con los patrones de las canciones.

Por supuesto, agregaron que el video también fue una característica importante. Ver a animales y a otros niños interactuando les hace querer imitar los mismos movimientos. A pesar de que los tiburones son animales peligrosos, estos se ven de forma amistosa en medio de un ambiente colorido.

Toda esta conjunción de elementos dio lugar al éxito de ‘Baby Shark’. No parece que las cosas vayan a acabar ahora, pues su popularidad sigue extendiéndose por todo el mundo.