En cualquier charla nostálgica sobre videojuegos de la vieja guardia sin duda Lemmings siempre es un título con potencial para ser recordado. Su ancestral historial de emulación pirata habla por sí solo.
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En aquellos días oscuros donde era necesario justificar ante los padres el potencial valor educativo de un videojuego; Lemmings era uno de los favoritos a mostrar como una herramienta para ejercitar la agilidad mental.
Esos días han quedado atrás. Esos niños desesperados por más cartuchos ahora tienen su propio dinero; y están dispuestos a gastarlo. Sony lo sabe y se ha aliado con Sad Puppy para resucitar esta franquicia.
Disponible para Android y iOS esta nueva encarnación de Lemmings entra de lleno al siglo XXI. Su interfaz es táctil, sus gráficos no se basan en sprites y los niveles están armados bajo una lógica vertical.
Pero tal vez el punto más llamativo, controvertido, y que revela la intención de negocio; es que se trata de un título free-to-play.
Esto significa que cualquiera podrá descargarlo sin costo, pero tendrán varias limitaciones y deberán pagar si quieren avanzar con mayor facilidad.
La presencia de micropagos ya no es algo que extrañe en estos días. Pero sí llama la atención que Sony esté involucrado pero no haya lanzado Lemmings para la PlayStation 4.