Quizá recuerdes la reciente y caótica October Update de Windows 10 y todos los problemas que trajo consigo, hasta el punto en que Microsoft pidió a quienes actualizaron que dejaran de usar su computadora hasta que se encontrara una solución. Y bueno, no fue el primer gran problema en este sentido para la empresa y su OS: lo mismo sucedió con la actualización de abril. En fin, que las grandes actualizaciones no han sido el punto fuerte de Microsoft últimamente… y ellos lo saben.
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Ahora se enfocarán sólo en mejorar Windows 10
Microsoft ha querido no sólo actualizar su OS, sino también añadir nuevas funciones y nueva estética para sus millones de usuarios en todo el mundo. Y es aquí donde han venido los fallos garrafales. Y es que parece que el proceso de pruebas en Insider no es tan serio como debería ser.
La idea actual, según Michael Fortin, vicepresidente corporativo de Windows, es que su equipo de desarrolladores ahora sí tendrá más en cuenta la retroalimentación de los Insiders y tendrán la responsabilidad de ofrecer un código de calidad. No sabemos si es que antes no la tenían…
Todo esto piensa favorecer la calidad del sistema operativo en vez de añadir nuevas funciones. Es decir: dar mantenimiento y hacerlo funcionar al 100% antes de renovarlo por completo. Y no es una mala idea. Podemos esperar al menos que todo el próximo año, la compañía esté dedicada a esto y trabajando más de cerca con el equipo de Insiders para lograr, por fin, poner en el mercado una actualización digna del sistema operativo más usado en el mundo.