Ciencia

Revelan los extraños secretos del “unicornio de Siberia” y la razón de su desaparición

Tres cosas que nadie sabía, pero que han sido reveladas tras un análisis de ADN.

Aunque se extinguió hace muchísimo, el llamado unicornio de Siberia sigue siendo fascinante para los paleontólogos. Una investigación ha evidenciado varios aspectos interesantes de este animal.

El conocimiento que teníamos sobre el unicornio de Siberia o elasmotherium sibiricum, se había visto obstaculizado por la falta de registros fósiles. Aunque se habían recuperado solo unos pocos huesos y habían sido difíciles de analizar, un equipo internacional de investigadores logró recolectar 23 piezas para el estudio.

Los huesos fueron analizador para ver si se podía recuperar el ADN y averiguar más, y finalmente lo lograron: se dieron cuenta de que todos se habían equivocado con respecto a la misteriosa bestia.

Lo primero tiene relación con la creencia de que murió hace 200.000 años, antes de la última Edad de Hielo. Descubrieron que los animales sobrevivieron mucho más tiempo: desaparecieron hace tan solo 36,000 años. De hecho, podrían haber vivido junto a los humanos. Para entonces, los humanos habían comenzado a poblar la estepa de Rusia, Kazajstán, Mongolia y el norte de China.

En segundo lugar, el llamado unicornio siberiano no estaba, como se había pensado, estrechamente relacionado con los rinocerontes modernos, sino que fue parte de un linaje único, que en ese tiempo se separó de la línea que dio origen a los rinocerontes que conocemos.

El tercer descubrimiento es que los humanos probablemente no tuvieron nada que ver con la desaparición del animal. Alan Cooper, de la Universidad de Adelaide explicó a ScienceAlert este tema:

Fue durante un período de cambio climático, que no fue extremo, pero que causó muchos inviernos y mucho frío. Esto alteró la extensión de los pastizales en el área (…) Pudimos ver el cambio en los isótopos en los huesos de los animales: solo comían hierba.

Otros animales del área que comían pasto comenzaron a cambiar sus dietas a arbustos o cualquier otra vegetación en la que pudieran hundir sus dientes, pero no fue el caso del unicornio siberiano. La conclusión es que esta resistencia al cambio de alimentación, junto al permafrost, lo mató.

Tags

Lo Último


Te recomendamos