Curiosidades

Marco Tempest, “El Mago Virtual”: “Muestro lo que podría hacer la tecnología en un futuro” [FW Entrevista]

Hablamos con Marco Tempest, famoso mago a nivel mundial por combinar sus trucos con el uso de dispositivos como celulares, gafas AR, computadores, etc.

Cuando se menciona la palabra «Mago», la gente suele imaginarse a un hombre de traje que puede sacar conejos de su sombrero de copa y es capaz de cortar a su asistente por la mitad con un serrucho sin que ella sufra daño alguno. Sin embargo, esta no es la única forma en la que se puede hacer trucos y engañar la vista de las personas.

Marco Tempest es un suizo que en algún momento de su vida cayó en cuenta de esto último. A sus 25 años era un joven capaz de engañar hasta al más escéptico con un increíble truco de cartas que dejaba sorprendido al que lo observara. Siendo cada vez más recursivo con las herramientas que usaba, el mago se proyectaba como todo un talento mundial del espectáculo. Sin embargo, faltaba algo más que le ayudara a poner su sello personal en este arte.

Ese algo lo encontró a principios de la década de los 90 con el auge de nuevas y misteriosas tecnologías. Con la ayuda de una de las compañías fundadas por Steve Jobs, Tempest comenzó a usar los primeros computadores para programar y presentar espectáculos nunca antes vistos. Su fama creció exponencialmente al conectar el mundo del entretenimiento con el de la ciencia y la tecnología y hoy miles de seguidores le agradecen por creer en lo especial de estos campos de estudio.

Fayerwayer: ¿Cómo y por qué decidió convertirse en un mago?

Marco Tempest: Fue la primera cosa en la que fui bueno. Es como cuando tienes un pasatiempo y tus padres dicen “¡Vaya, eres muy bueno haciendo eso!” y aparte te inscribes a un concurso y lo ganas. Fue entonces algo muy natural la emoción que desarrollé por la magia. Comencé con ella como un hobbie, fui exitoso usándola, así que me quedé con ella.

Tuve un profesor que era un mago amateur, fui a tiendas de magia, leí libros, etc. La magia no es algo de lo que aprendas en el colegio, tienes que investigar por ti mismo.

FW: ¿Cuándo la tecnología se volvió una parte de sus trucos?

MT: En los primeros años de los 90s la tecnología empezó a hacerse más accesible. Antes de eso costaba millones de dólares tener algo de tecnología. Así que en esa época empezabas a ver las primeras terminales de computación que todavía valían miles de dólares pero ya era más probable acceder al tipo de elementos que solo habíamos visto en las películas.

Cuando eso pasó, empecé a jugar con la tecnología.

FW: ¿Qué usó como herramienta la primera vez?

MT: Cuando Steve Jobs dejó Apple por primera vez, el fundó una compañía llamada NeXT Computer. Entonces, la empresa lanzó un computador muy bonito pero muy caro. Les escribí una carta a ellos y a Steve Jobs diciéndoles “Hola, si pudiera tener uno de los computadores de NeXT, yo podría hacer la siguiente (“Next”) generación de magia. Si me dieran uno, podría hacer un gran espectáculo para el evento de presentación de sus productos…” Dos meses más tarde recibí dos cajas grandes desde Estados Unidos y adentro estaba el computador.

También me ayudaron a empezar a aprender sobre programación. No es que hubiera mucho software para hacer magia… así que empecé a programar y a crear actos y presentaciones para compañías como NeXT Computer, Sony, Sillicon Graphics, etc. Básicamente hice estas presentaciones a cambio de hardware.

FW: ¿Qué de diferente hay en ser un mago a otro tipo de persona?

MT: Hacer magia siempre gira a tu alrededor. Es como “¡Ja! ¿Cómo lo hice? ¿Soy genial o qué?» Es ese el tipo de sensación que le da el mago a la audiencia. Ese es el tipo de conversación que no me gusta mucho tener.

Estoy más interesado en contar historias utilizando un poco de magia y así hacer la historia más importante que yo. Por ejemplo, “¿cómo sería si hubiera drones siguiéndonos a todas partes?” o, “¿cómo sería si tuviéramos dispositivos que puedan leer nuestras mentes y generar realidad aumentada?” o, “¿cómo sería si hubiera sistemas que nos ayudaran a aprender más rápido y nos ayudaran a resolver problemas más rápido?”

Desde hace 10 años he comenzado a ser menos un mago y más un contador de historias que usa la tecnología para transmitir historias sobre el futuro. La forma en la que uso la magia hoy no es para decir “¡Ja! Te engañé”. La magia la uso es para hacer que la tecnología haga algo que no puede hacer pero que podría hacer muy pronto. De esta forma ves lo que podría hacer la tecnología pronto y esa es una conversación que no es acerca de mí, es una conversación sobre nuestro futuro. Estoy más interesado en eso.

Ya no soy un mago. Soy algo más como… un futurista, un contador de historias, un tecnólogo creativo… no se cuál etiqueta sería la adecuada.

FW: ¿Cómo terminó colaborando con el MIT (Massachussets Institute of Techonology) y la NASA?

MT: Fui invitado hace algunos años al MIT Media Lab para convertirme en un “Director’s Fellow”. Se podría decir que una persona con ese título gana una especie de “visa” del MIT Media Lab. La labor de un Director’s Fellow es traer el mundo al Media Lab y viceversa. Puedo colaborar con estudiantes y la facultad, enseñar en un curso, hacer creaciones y mostrarlas al mundo para que se sepa qué se está haciendo… Hace 30 años cuando el Media Lab fue fundado, necesitabas un supercomputador para desarrollar cualquier cosa. Ahora es fácil para cualquiera tener un MacBook para hacer investigaciones o prototipos. Se podría decir que soy como un embajador para el MIT.

También me uní al Laboratorio de Propulsión Jet de la NASA como algo que podrías llamar un “Tecnólogo Creativo”. Ayudé a equipos científicos con sus historias y narrativas de sus misiones futuras con el hecho de cómo deberían ser contadas hacia el público y al resto de la comunidad científica. Fue una gran oportunidad para expandir lo que hago.

FW: ¿Cuál piensa que ha sido el impacto en la sociedad de una persona como usted?

MT: *Risas* No lo se bien… A veces me encuentro con gente en la universidad como estudiantes jóvenes y me dicen “¡Hace 10 años te vi hacer algo genial! Eso hizo que se me despertara el interés en el tema de investigación que estoy adelantando ahora” Eso es fabuloso cuando pasa.

Es difícil medir desde mi punto algún impacto…  Un montón de gente ve lo que yo hago y se dan cuenta que en realidad es… algo extraño. No es algo que se suponga que vaya a tener éxito. ¿Cómo es posible que exista alguien como yo?

Eso motiva a la gente. Si yo lo puedo hacer, otras personas también lo pueden hacer. Ese es el impacto: la gente ve a alguien haciendo algo que ama hacer (algo inusual) y tal vez eso abra la puerta a otras cosas inusuales.

FW: ¿Cuál sería su consejo para personas que cuentan historias de una manera distinta?

MT: ¡Experimenta! Todo el que comienza con algo no resulta ser muy bueno al inicio. Yo no era bueno cuando empecé a tratar de contar historias. Era malo de verdad. Sin embargo, mejoré en eso haciéndolo todo el tiempo. Si quieres hacer este tipo de trabajo tienes que experimentar, seguir siendo apasionado, compartir conocimiento con la gente, querer aprender nuevas cosas todos los días, abandonar cosas que no funcionan, seguir trabajando en cosas que parecen funcionar, no rendirse muy rápido… ese es el tipo de mentalidad que necesitas.

FW: ¿Qué tan importante es la tecnología ahora?

MT: La tecnología se está moviendo muy rápido, a diferencia de la cultura. Esta última no se mueve tan rápido, así que seguimos siendo los mismos. En 10 años todos hemos obtenido iPhones y demás smartphones, dispositivos de realidad virtual y aumentada, etc… pero la cultura sigue igual a como era hace 50 años.

La tecnología no nos cambia. Nos abre oportunidades y posibilidades pero no cambia la cultura automáticamente.

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