Si aún no han visto Star Wars VIII: Los últimos Jedi, quedan advertidos de que este artículo discutirá fuertes spoilers para la película
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Ámenla u ódienla, la última película en la saga principal de Star Wars contiene escenas que muchos habían estado esperando durante años y que fueron sumamente importantes para los fanáticos de la épica franquicia de ciencia ficción..
Durante el episodio VIII de Star Wars, Rian Johnson nos mostro como la Primera Orden logra acorralar a los últimos miembros de la resistencia en una antigua base de la rebelión en el planeta Crait. Cuando todo parece estar perdido, Luke Skywalker aparece parra permitirle a la resistencia escapar, y el sólo se enfrenta a las máquinas de guerra de Kylo Ren y la Primera Orden.
Luego de tentar a Kylo Ren a una pelea frente a frente, resulta ser que este Luke es solo una proyección de la Fuerza, mientras que el verdadero se encuentra aún en el templo Jedi en Ahch-To. Luego de revelar esto, agotado por el esfuerzo, Luke colapsa y desaparece de la misma manera que sus maestros Yoda y Obi-Wan lo hicieron antes de él, mirando hacia el horizonte con sus pensamientos desconocidos para el público.
Pues ahora, con el lanzamiento de la adaptación a cómic de Marvel, hemos podido entender por fin lo que Luke se dice a sí mismo:
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“Y así termina como comenzó. Bajo la luz de dos soles. Antes de entrar a un mundo más grande.”
Una gran referencia al inicio de todo lo que vino antes para el maestro Jedi, desde sus inicios como un granjero en el planeta desierto de Tatooine. Sin duda un ejemplo de como unas simples palabras lograron mejorar una escena (que en lo personal ya era bastante buena).