Este es el hombre que eliminó a Donald Trump de Twitter

Todos recordamos con nostalgia aquel breve momento de fiesta en el que sorpresivamente alguien borró de Twitter la cuenta oficial de Donald Trump. El incidente duró tan sólo 11 minutos, pero bastaron para elevar al autor de ese acto al estatus de leyenda. Hoy, descubrimos por fin la identidad de ese héroe.

Se trata de Bahtiyar Duysak, un hombre alemán, graduado de la Universidad de Birmingham en 2015, con una maestría en finanzas bancarias, que trabajó como contratista para Twitter y que decidió suspender la cuenta de Trump durante sus últimos minutos como empleado para la red social.

Según relata el muchacho en una entrevista exclusiva para TechCrunch, él trabajaba como asistente de atención a clientes en la división de Seguridad de Twitter, y su equipo era el responsable de recibir las alertas cuando los usuarios marcaban el mal comportamiento de alguna otra cuenta en la plataforma.

Acoso, cuentas apócrifas, comentarios inapropiados, difusión de material extremista y noticias falsas. Parece una descripción de la cuenta de Twitter de Donald Trump, pero es en realidad la clase de reportes revisados por Duysak antes de abandonar la compañía.

En su último día de trabajo, justo minutos antes de cerrar sesión y retirarse de las oficinas de Twitter, recibió un reporte un usuario denunciando la cuenta de Trump, y como gesto de despedida decidió activar la suspensión de la cuenta del mandatario y marcharse del sitio. Aunque jamás midió las consecuencias:

En mi opinión, definitivamente fue un error, pero como dije, pasé un tiempo salvaje en Estados Unidos y estaba cansado. A veces todos cometemos un error y es posible que haya cometido un error.

Pero yo no llegué a hackear a nadie. No hice nada que no estuviera autorizado a hacer.

Duysak afirma que jamás creyó que el asunto crecería a tal grado, incluso deja entrever que consideraba que Twitter tenía bloqueado desde su sistema interno la posibilidad de eliminar la cuenta de Donald Trump. De modo que el gesto de autorizar la suspensión no tendría mayor consecuencia.

La realidad es que desde entonces el muchacho ha visto a sus familiares y amigos acosados por reporteros intentando contactarlo, y por ello ha decidido salir a dar su versión de la historia.

¿Héroe o payaso?