Si el Hydrogen One de RED -compañía que se dedica a hacer cámaras de cine– cumple lo que promete aunque sea de la forma más básica, será verdaderamente un dispositivo del futuro.
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RED ha anunciado un smartphone con pantalla holográfica. No la pantalla tradicional con Gorilla ni QLED ni nada; holográfica. Y para ver esa holografía no se necesitarán lentes ni ningún aparato extra especial ya que será in situ, a simple vista.
¿Cómo se hace la magia? Según RED, se trata de una tecnología increíblemente avanzada la cual proyecta una pantalla holográfica de 5.7 pulgadas que sirve para visualizar contenido “tradicional” en 2D, contenido en 3D, realidad virtual, realidad aumentada e incluso algo llamado Hydrongen 4-View (H4V). No se que será eso porque no se ha explicado.
El Hydrogen One es, ante todo, un smartphone. Así lo promociona RED. Corre con Android y es el eje de un ecosistema llamado Hydrogen (apropiadamente) en el cual se integrarán los otros productos de RED: las cámaras profesionales Scarlet, Weapon y Epic, además de accesorios especiales con los cuales se podrá crear contenido holográfico.
Todo esto suena demasiado bello para ser verdad y lo cierto es que, ante todo, necesitamos ver el Hydrogen One funcionando de una forma al menos similar a la que se promete. El dispositivo es para nada barato, sino al contrario: la versión de aluminio costará USD $1195 y la de titanio, USD $1595. Ambas versiones se empezarán a distribuir durante el primer trimestre del 2018.
Imaginen, por un momento, que RED cumple su promesa y el Hydrogen One termina siendo el primer y verdadero teléfono holográfico. Estaríamos ante un punto de quiebre demasiado brutal, porque si bien el equipo es caro, en realidad no parece tan caro tomando en cuenta lo que la compañía dice que hará. Y de ahí en adelante, los precios solo tendrán bajar.
Ver para creer, dicen. Y yo quiero creer.
