BMW quiere lanzar un vehículo eléctrico autónomo de manera comercial para el año 2021, por lo que la marca germana se encuentra desde ya abriendo una fábrica para realizar estos equipos en la ciudad de Unterschleissheim, en las cercanías de Múnich, Alemania.
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Cerca de dos mil empleados serán los encargados de llevar este proyecto a la realidad, armando el automóvil completamente desde cero, vale decir, desde el software que lo controle, hasta el más ínfimo detalle de la carrocería.
Este centro incluye una pista de pruebas para estos vehículos -algo que otras marcas parecen necesitar con urgencia-, la que será ocupada por distintos expertos que, según indica BMW por medio de su blog oficial, serán capaces de realizar pruebas en vivo mientras conducen los prototipos, obteniendo así un feedback inmediato.
Las instalaciones comenzarán a funcionar a mediados de 2017, esperando que ya en 2021 logren generar el ansiado automóvil eléctrico autónomo que la empresa alemana desea.
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