Los orígenes de la Luna se han aceptado en base a una teoría que indica que un objeto del tamaño de Marte chocó con la Tierra y de los pedazos resultantes del impacto nació la Luna.
Sin embargo, científicos están reformulando esa teoría gracias a nuevos descubrimientos que indicarían que el impacto inicial no fue tan “suave” como se imaginaba, sino mucho más violento. Según el paper publicado por Nature (vía Gizmodo), un cuerpo gigante habría chocado con la Tierra de ese entonces pero el impacto fue tan grande que parte del planeta se habría pulverizado.
Originalmente se creía que la Luna estaba compuesta en un 80% por el objeto chocador en cuestión -conocido como Theia- y un 20% por la Tierra. Pero posteriores estudios químicos de rocas lunares traídas por la misión Apollo en los años 70 han revelado que hay demasiadas similitudes entre la Tierra y la Luna, tanto así que los nuevos descubrimientos “no se concuerdan con la teoría original”.
Los nuevos análisis químicos indican que los componentes encontrados en las rocas lunares solo pueden explicarse en base a una colisión de alto impacto, una que haya evaporado gran parte de la Tierra y generado mucho calor. Del vapor resultante de la colisión se habría creado el satélite natural y ello explicaría los hallazgos recientes.
Todo lo que conocemos de los inicios del sistema solar es a partir de estudios de meteoritos y muestras lunares que son muy, muy antiguas. Y han cambiado lo que entendíamos de él, cuyos orígenes fueron mucho más violentos de lo que creíamos.
Pese a que ya hay algunos detractores sobre la nueva teoría, los científicos creen que esto es normal porque nunca las teorías se aceptan de buenas a primeras. Quizás de aquí a una o dos décadas, los orígenes de la Luna por causa de un explosión megatónica sean más aceptados que ahora.
Opinar es gratis, como siempre. No olviden seguirnos y comentar en Facebook.
