Transportar el mercado del entretenimiento y de la información al mundo tecnológico funciona de maravilla. A nivel general, sabemos que las personas ya no compran el diario, lo leen en línea; ya no compran discos en tiendas, los descargan; ya no compran libros en librerías, lo hacen virtualmente; ya no ven series en televisión, lo hacen en sus computadores. Casi todo el mundo cuenta con un smartphone. Incluso, cada vez más son los gadgets que están siendo pensados en el bienestar de las personas.
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La tecnología es parte de nuestra vida hace años. Y si estamos tan inmersos en ella, ¿por qué no aplicarlo en todos los aspectos de nuestra vida, tanto como en lo laboral y en lo personal?
En el marco del Digital Summit, el evento que abarca temas de innovación y emprendimiento, Richard Soley, Director Ejecutivo del International Internet Consortium (ICC) habló sobre cómo el Internet de las Cosas puede facilitarnos la vida.
The Internet of Things se trata de la conectividad, es decir, conectar todo a internet, tanto los objetos como las personas. Es “unir la revolución industrial con la revolución del internet”, lo que genera el término “Internet Industrial”. Esto significa que los equipos, las herramientas, el personal y todas las partes que componen una empresa o un servicio estén interconectados a través de una extensa base de datos.
Teniendo en cuenta esto, Soley asegura que “la convergencia del Internet de las Cosas, la Industria 4.0 y los sistemas cíber-físicos presentan una enorme oportunidad”. ¿Una oportunidad para qué? Para emprender, crear servicios e implementar los recursos más modernos en los sistemas actuales.
Aplicar la tecnología que ya tenemos en la industria que ya tenemos, como en la agricultura, en la salud, en el transporte y la seguridad.
¿Por qué usarlo? Porque facilita las cosas. En el caso de una empresa, por ejemplo, se puede integrar un sistema que rastree todo: personas, herramientas, equipos, transporte, etc. Gracias a esto es más fácil identificar quién o qué no está funcionando correctamente y solucionar el problema de manera más rápida y eficiente.
El problema de Chile es la desconectividad, podría utilizar ese tipo de sistema, pero no lo hace. Se conseguirían grandes beneficios: mejor seguridad, gestión y control de servicios, desarrolladas con tecnología actualizada a un bajo costo.
Según Soley, el futuro está en buscar maneras de reducir costos de mantenimiento en empresas, mejorar la salud en relación a los cuidados de los pacientes, disminuir el desperdicio de recursos naturales y evitar accidentes de tránsito.
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El proceso es lento, pero poco a poco se van sumando empresas chilenas grandes y pequeñas al Internet Industrial. Codelco fue la primera minera en el mundo en incorporarse a ésta. Asimismo, existen emprendedores que se están integrando, como Drivetech, una empresa de seguridad y control de vehículos, e Instacrops, la cual presta servicios de monitoreo en línea y reportes agrícolas.
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