El estreno anticipado y limitado de la película Steve Jobs de Aaron Sorkin no estuvo nada mal; durante su primer fin de semana y tras mostrarse en cerca de 60 salas, la producción recaudó USD $2.26 millones, según reporta Deadline.
Más importante aún, el guionista Aaron Sorkin sale al paso de las críticas a ciertas libertades creativas de la película (vaya que novedad, una película basada en hechos reales que se toma libertades creativas) y en una conferencia de prensa en Europa (vía The Guardian) dice que tiene su conciencia tranquila:
Hasta donde se, Steve Jobs no tuvo enfrentamientos con las mismas seis personas antes del lanzamiento de algún producto. Eso es algo agregado del escritor. Pero sí pienso que la película captura muy bien algunas grandes verdades, algunas muy importantes que realmente sucedieron antes de mostrar ciertos productos
[…] Lo que se ve en la película es una dramatización de varios conflictos personales que Jobs tuvo en su vida y que ilustran algo. ¿Es eso justo? Yo creo que sí. Tengo mi conciencia tranquila.
Lo cierto es que la película no ha estado ajena a ciertas polémicas, generalmente creadas por personas que no querían que esta se materializara. La viuda de Steve Jobs, Laurene Powell, intentó alguna vez (o veces) frenar la producción y el mismo Sorkin tuvo algunos dimes y diretes con el propio Tim Cook, CEO actual de Apple.
Más allá de lo ajustados que puedan ser los hechos narrados en la producción, una película como esta hay que tomarla como lo que es: entretenimiento basado ligeramente en hechos reales. Porque a la larga, no es más que eso.
