En Android 6.0 Marshmallow, las aplicaciones instaladas de fábrica por las compañías (bloatware, en otros términos) tendrán que pasar por mismo sistema de gestión de permisos que todas las demás aplicaciones.
PUBLICIDAD
Según el reporte de Android Police, la documentación de Android exigirá a todas las aplicaciones a solicitar permisos al usuario antes de ejecutar ciertas acciones, sin importar si se trata de una instalada por un fabricante.
Ahora si bien esto no significa que se acabará el bloatware en los equipos, lo importante es que con la nueva versión de Android cualquier operación que esas apps lleven a cabo tendrán que pasar primero por el visto bueno del usuario.
La traducción del texto oficial de la documentación indica lo siguiente.
Las aplicaciones DEBEN mostrar una interfaz dedicada al usuario par que decida si quiere entregar el permiso solicitado y además entregar una interfaz al usuario para gestionar esos permiso
Las aplicación DEBEN tener una y solo una implementación para ambas interfaces de usuario
No DEBEN entregar permisos a aplicaciones per-instaladas a menos que: el consentimiento del usuario pueda ser obtenido antes de que se ejecute la aplicación o si los permisos están asociados a un patrón para el cual la aplicación per-instalada está marcada por defecto.
En el papel, esta nueva política de permisos debería ser muy beneficiosa para el usuario, por las razones que conocemos todos los que hemos tenido un teléfono lleno de bloatware.
