Controlar la iluminación, las alarmas de seguridad, electrodomésticos y calefacción dejó de ser algo del futuro. Este tipo de tecnologías se han ido desarrollando de la mano de aplicaciones móviles y su acceso cada vez es mayor.
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Un estudio realizado por ConsumerLab en países como Chile, España, Estados Unidos, Rusia y Suecia, reportó que en Chile existe un potencial mercado para los artículos de domótica u “hogar conectado”, detectando que hay un 65% de los chilenos altamente interesados en experimentar estas tecnologías, por sobre España (45%) y Estados Unidos (39%).
De acuerdo a Diana Moya, directora de ConsumerLab de Ericcson Latinoamérica, “en general ha habido una respuesta positiva hacia el concepto y los beneficios del hogar conectado“. Algo que se debe principalmente a estilos de vida más ajetreados, con horarios de trabajo más exigentes.
Los beneficios de la domótica son varios: Por una parte mejora la seguridad del hogar y por otra permite controlar la casa cuando se está lejos de ellas.
De acuerdo al estudio, los jóvenes solteros son los que más utilizan este tipo de tecnologías, algo que está netamente vinculado a su interés por adoptar nuevas tecnologías. En Chile, las áreas con más demanda tienen que ver con “seguridad en el hogar” (48%), “salud y bienestar” (47%) y “energías y servicios públicos” (41%).
Por el momento, estos servicios siguen siendo restrictivos por su valor, pero todo indica que existe alto interés por estos sistemas para el hogar. Por ejemplo, un 50% de los encuestados chilenos afirmó que le gustaría tener servicios integrados en su hogar y que un 70% considera fundamental la existencia de una asesoría y un soporte técnico adecuado al momento de acceder a estas tecnologías.
Al mismo tiempo hemos visto en el mercado nuevos tipos de artículos de línea blanca que pueden ser sincronizados a través de un teléfono, como lo es el caso de algunos refrigeradores.