La compañía surcoreana Samsung está registrando dificultades para competir en el mercado de teléfonos móviles y alcanzó su quinto trimestre con retroceso en sus beneficios.
Entre abril y junio de este año Samsung generó sólo 4.900 millones de dólares, un 8% menos que en el mismo trimestre del año anterior.
Estas ganancias corresponden en gran medida al lanzamiento del Galaxy S6, lanzado a principios del trimestre, y que ha coincidido con lanzamientos de Apple y otros fabricantes chinos.
Según informa el Wall Street Journal, en busca de seguir siendo competitivos los precios de los smartphones de Samsung han visto una reducción del 10%, por debajo de los 300 dólares, mientras que sus rivales en Apple han continuado con los mismos precios del año pasado para el mismo cuarto en sus iPhones más populares.
A pesar de los informes económicos, Samsung ha abierto una nueva fábrica dedicada a la producción del Galaxy S6 Edge, dispositivo que ha sufrido retrasos debido a la complejidad de su pantalla curva, pero que igualmente verá el lanzamiento de un nuevo modelo de mayor tamaño que pueda tener una mejor recepción con los consumidores.
Según la IDC, a pesar de los retrocesos en sus ingresos por beneficios, la empresa surcoreana continúa a la cabeza de la industria, pero su cuota de mercado ha bajado hasta el 21,7%.