Podríamos pensar que en China la compra y venta de teléfonos inteligentes, gracias a lo que hemos podido ver en distintos medios de comunicación, es algo que ocurre todos los días y que va en constante aumento, no obstante parece que ya no es así. Un estudio midió el consumo de este tipo de aparatos durante lo que va de 2015 y registró la primera baja en 6 años, llegando a 98,8 millones de dispositivos vendidos durante el primer cuarto de este año, lo que significa una caída bastante drástica de 4,3% en relación al año anterior, publica Reuters.
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La explicación ante dicha caída, según indica la IDC -firma responsable del estudio-, es que el mercado hoy se encuentra ante una sobreoferta de aparatos de este tipo, lo cual sin duda alguna es un problema bastante grande para los fabricantes de teléfonos inteligentes, ya que significan un punto clave en la economía de los privados. Matemática simple: si China no consume, las ventas caen drásticamente y las pérdidas comienzarían a notarse de muy mala manera.
Si bien la pérdida del país asiático (en términos muy generales) es un punto bastante crítico para las ya mencionadas compañías, esto también sería la excusa perfecta para acelerar el proceso de entrada a India, o bien para estimular mayormente el consumo en dicho país y en el área del sur de esa región.
Hasta el día de hoy, las empresas que se reparten las mayores ganancias en China son Apple (en primer lugar, con un 14,7%), seguido por Xiaomi (13,7%) y Huawei (11,4%), mientras que en el cuarto puesto aún es para Samsung, con un 9,7% de participación en el mercado.
