La plataforma de transporte Uber se toma la seguridad de sus pasajeros muy en serio, pues acaba de anunciar que evalúa la opción de usar detectores de mentiras, escáneres biométricos y reconocimiento de voz para probar a sus nuevos conductores, con el objetivo de verificar sus antecedentes y garantizar que se tratan de personas que no dañarán a los clientes.
Y es que según declaró el jefe de Seguridad Global en Uber, Philip Cardenas, “la tecnología y el análisis científico” permitirán verificar la identidad de los conductores antes de contratarlos. Pero no sólo harán eso: la empresa también trabaja en un sistema para que los pasajeros puedan contactarse con ellos durante el viaje en caso de emergencias, aumentando aún más la fiscalización antes y durante el servicio.
Estas nuevas y futuras medidas llegan en el marco de las recientes prohibiciones de Uber en varios países del mundo, con actores políticos y sociales argumentando que la plataforma es ilegal al competir directamente contra el gremio de taxis, mientras que otras voces se refieren precisamente a la facilidad para que cualquier conductor no verificado y sin un permiso adecuado transporte público general, lo cual pondría en riesgo la integridad de los pasajeros y frente a lo cual Uber ya está trabajando.
