Pese a que ya no necesitará conexión permanente a internet, la Xbox One si tendrá una relación obligatoria con la red de redes el primer día que llegue a las casas de sus usuarios. Y es que desde Microsoft han confirmado que la consola estará prácticamente inútil a menos que se aplique dicha instalación.
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Esa confirmación la dio Albert Penello en entrevista con Engadget. No importará si tienen juegos en formato físico que puedan jugarse sin conexión; para que la consola haga lo suyo, tendrá que conectarse y actualizar el sistema operativo: “Muchas de las aplicaciones llegarán con esa actualización, por lo que esta no será opcional”, dice Penello.
En cualquier caso, esto no es precisamente una novedad ya que desde hace tiempo se sabía que habría que conectar la Xbox One a internet una vez salida desde la caja para proceder a la configuración inicial. Sin embargo, recién ahora se puede confirmar que dicha conexión inicial va a ser tan crucial como para convertir un aparato de 500 dólares en un ladrillo moderno.
Quienes vivan en el campo o la importen desde Estados Unidos a un país sin internet, ya saben. Más les vale tener una conexión.
Link: Engadget
