A Primera Vista

LG G2, un gama alta correcto pero contradictorio [A Primera Vista]

El nuevo teléfono icónico es un espectacular despliegue de técnica y elegancia en diseño, pero pequeñas cosas hacen que nos replanteemos si nos gusta tanto como hasta antes de encenderlo. Lo conocimos en Nueva York este martes, y esta es nuestra primera impresión.

¿Alguna vez conociste a tu héroe de infancia y te diste cuenta que era un patán? ¿Alguna vez saliste con la chica de tus sueños y descubriste que era mucho más aburrida y mojigata de lo que te imaginabas? Muchas veces las cosas lucen mucho mejor en el papel y se ven mucho mejor en las fotos, y nos hacemos una idea platónica de lo que esperamos de ese primer encuentro.

Pero sacar las cosas de nuestra imaginación y llevarlas a la realidad en un único encuentro puede ser peligroso… Ya sabes, sólo hay una primera impresión. La que pudimos experimentar teniendo en la mano por primera vez el LG G2 me deja con sentimientos encontrados.

A primera vista, el equipo acusa el cambio total de lenguaje de diseño en comparación con la generación anterior de equipos plasmado en si mismo. Su construcción unibody — así lo declaran — tiene muchos elementos novedosos que se presentan de forma obvia en todos sus ángulos.

Pero primero hablemos de sus materiales. Es plástico, y plástico del mismo que podríamos encontrar en otros dispositivos LG, lo que nos hace pensar inmediatamente en dos cosas: En un diseño muy cuidado, y en un futuro a mediano plazo con rayas notorias si no le ponemos una funda.

Pero eso es obviable pues el G2 sin funda luce genial, y en la mano se siente como un equipo de excelente calidad. Liviano, que no cruje al forzarlo con torsión, y que en lineas generales se ve muy elegante. Ya sea en blanco o negro, luce absurdamente bien. Eso sí, LG nos ha malacostumbrado a la implementación de nuevos materiales en sus teléfonos, por lo que esperaban la utilización de cristal o algún otro material no-plástico estarán algo decepcionados en este punto.

Los botones ubicados en la parte trasera son totalmente fuera de lo común, y eso se nota desde el primer momento que tienes el teléfono en la mano. El botón de encendido queda perfecto en esa posición, pues — efectivamente — muchos ponemos el índice ahí para soportar el teléfono mientras hablamos, por lo que resulta muy conveniente. Pero como el botón es brilloso y sobresale ligeramente, queda la sensación de que se marcará a poco andar si no lo dejamos sobre superficies muy lisas.

El botón podrá estar perfectamente ubicado, pero igualmente tiendes a buscarlo arriba o al costado del teléfono. Es cosa de costumbre.

Un conjunto de excelentes características

Técnicamente el teléfono es todo lo que podríamos esperar de un gama alta del segundo semestre de 2013: Snapdragon 800, 2 GB de RAM, cámara de 13MP con estabilización óptica y un sinfín de adiciones que sacan a relucir todo aquello por lo que LG es buenísimo a nivel de hardware.

La reina de este conjunto, por cierto, es la hermosa pantalla de 5.2 pulgadas que el G2 posee. IPS, Full HD y con una definición que le da la razón a los ejecutivos de la surcoreana. Es ideal para consumir multimedia, y todavía está 0.1 pulgadas por debajo del Galaxy Note, el primer Phablet como tal que vimos llegar al mercado, por lo que está ingeniosamente en el límite de la categoría, demarcando esta frontera de forma efectiva.

Como buen panel IPS, no hay nada ahí que se pueda criticar realmente. Es hermoso, muy claro y se integra perfectamente al resto del equipo con un cristal de bordes curvos que parece abrazar al resto del equipo.

El teléfono es ágil — no podía ser de otra forma — y muy bien consolidado como conjunto. Qualcomm trabajó con LG directamente para ayudar a crear este teléfono, y a primera vista se notan los primeros frutos de esta relación.

Snapdragon 800 es la decisión obvia a nivel de SoC. Lo vimos en acción antes bajo las condiciones que Qualcomm propició en un taller en el que pudimos realizar benchmarks a aparatos con este procesador. Aunque no fue posible realizar pruebas de rendimiento en estas unidades de exhibición, la base elegida augura un rendimiento superior. Ya lo veremos cuando el equipo pase por nuestros W Labs.

La cámara es otro punto a destacar. Sí, son 13MP como otros gama alta que encontramos en el mercado, pero el estabilizador hace una gran diferencia a la hora de tomar la foto. Definitivamente soy un tipo que tiene pésimo pulso — lo notarán en el video — y a pesar de eso pude tomar fotos más que aceptables en condiciones de luz bastante complejas para un smartphone, e incluso repetirla con zoom al máximo sin que el resultado saliera movido.

Ahí vienen las contradicciones

Otra cosa a destacar es que la capa de software propio que este dispositivo trae. Algunas de estas cosas son muy convenientes como formas para despertar el equipo y contestar el teléfono sin tener que tocar la pantalla, y otras que todavía no tienen mucho sentido como un sistema integrado al navegador para sacar capturas de pantalla focalizadas en ciertas zonas de la pantalla.

Sea como sea, LG logró dotar a su nuevo teléfono de funciones que van más allá de lo que Android permite, y eso siempre ayudará a crear identidad y experiencia de uso diferenciada, lo que es bueno.

A nivel de sonido, su altavoz simplemente es olvidable y no pasa de ser algo común y corriente. Pero basta conectar un par de auriculares de calidad en este aparato y la situación cambia rotundamente.

El teléfono es capaz de reproducir archivos FLAC de muy alta calidad sin mayores problemas, entregando una experiencia de consumo de música realmente impresionante. No soy un tipo que se declare fanático del audio Hi-Fi, pero me atrevería a decir que nunca antes encontré una experiencia así en un equipo móvil. Claro, un archivo FLAC puede pesar lo que todo un disco en MP3 de 15 pistas pesa, pero para quienes valoren esta función esto hará que la adquisición valga totalmente la pena.

Esto es relevante considerando que las unidades a las que tuvimos acceso tienen 16GB de memoria interna, y de esos sólo 10 u 11 están disponibles para ser llenadas con tus cosas. Este teléfono es probablemente el mejor equipo para consumo de multimedia de alta calidad, pero su memoria interna no ampliable es un balazo en el pie para quienes realmente quieran usarlo como reproductor Hi-Fi.

Pero no todo esto es perfecto. A pesar de todas las novedades, el hecho que sea un equipo LG inmediatamente levanta muchas dudas respecto del futuro de sus actualizaciones. Este es un buen momento para que la surcoreana tape bocas — la mía incluida — ofreciendo un soporte como corresponde a este dispositivo, y quienes compren este aparato puedan disfrutar por largo tiempo de una experiencia como la que debería asegurarse en equipos de esta gama.

Otra cosa que luce contradictoria es la interfaz del teléfono. El look del equipo es muy elegante y de lineas austeras, pero basta con encender su pantalla y una explosión de color te abofeteará la cara inmisericordemente. Conversando con varios representantes de otros medios, coincidimos en que este equipo necesitaba algo más sobrio para destacar, pero — lamentablemente — ese no parece ser el camino por el que la industria móvil va durante 2013 con Samsung, Huawei, Apple y LG liderando el grupo de interfaces que se olvidaron de la sobriedad.

8 semanas — como máximo — nos separan de ver este dispositivo en los catálogos de operadores alrededor del mundo, lo que deja a su competencia con la ardua tarea de sorprender de la misma manera en que nos hemos visto sorprendidos hoy.

LG puso este martes en el escenario — y en nuestras manos — un dispositivo impecable técnicamente, el que saca a relucir todo el potencial no explotado que habíamos esperado de parte de este fabricante. Sin embargo, al mismo tiempo luce incoherente por pequeños detalles que, aunque suenen tontos, pueden terminar estropeando una experiencia de uso que en el papel luce fabulosa, pero que finalmente no está a la altura de lo que este aparato proyecta estando apagado. Es como si uno de los Niños Cantores de Viena cantara desentonado… La presentación se estropea.

Uno de estos en edición Google sería mi próximo teléfono sin pensarlo siquiera.

Fuera de eso, es un gran dispositivo. Esperamos que llegue pronto a nuestras manos para un análisis en mayor profundidad.

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