Parece una avalancha de sistemas operativos los que veremos llegar dentro de poco tiempo, y ahora se suma uno previamente anunciado a esta fiesta de lanzamientos del primer semestre: Tizen.
Fruto de la colaboración entre la surcoreana e Intel, y basado en Linux, Samsung será la encargada de inundar mercados seleccionados con teléfonos movidos por este sistema operativo durante 2013 bajo la promesa de ser “competitivos y poderosos”. Todo sea por alejarse de su actual dependencia de Android tras la compra de Motorola por parte de Google.
La llegada de estos equipos podría estar marcada por nuestra fecha favorita en el calendario del año, Mobile World Congress. En esta cita, Samsung realizaría el anuncio de la llegada de estos equipos, los que tendrían características que irían entre las de un aparato de gama media-alta y las de un gama alta del año pasado… Igualmente bien.
La gran incógnita detrás de estos aparatos está arraigada en el ecosistema en el que se integrarán. Actualmente Samsung tiene una posición dominante en distintas áreas de la electrónica de consumo, lo que podría dar una oportunidad que ya quisiera cualquier otro fabricante para apalancar sus lanzamientos con nuevos dispositivos que cierren el círculo de la experiencia controlada que Samsung quiera ofrecer.
Y es que, convengamos, por experiencia y mejora sustancial de lo que actualmente existe, Tizen no entregaría muchas ventajas contra el resto de la oferta de sistemas operativos. El ecosistema podría ser fundamental para que nos tomemos en serio un nuevo OS móvil. La promesa incumplida con Bada podría — por fin — darse este año.
Link: Samsung to Sell Tizen-Based Handsets After Motorola Deal (Bloomberg)
