A medida que desde todos los sectores hay cada vez más interés en el pago a través de los móviles: Bancos, usuarios, empresas, operadoras… también aumenta más preocupación en temas de seguridad. La Biometría es una apuesta segura para evitar el fraude y desde la Facultad de Informática de Madrid el investigador Gonzalo Bailador ha creado dos nuevas técnicas biométricas para identificar con más seguridad a los usuarios de teléfonos inteligentes.
¿En qué consiste la Biometría? En utilizar métodos automáticos para identificar a las personas por medio de la retina, huellas dactilares, patrones faciales…
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¿Y cuáles son las técnicas que aporta este investigador? Pues parecen de ciencia ficción. Por una parte se podrá fotografiar con el móvil una mano o las dos y según la forma de los dedos y de la mano, identificar al usuario: Ancho de la palma, longitud de los dedos… Está claro que somos únicos físicamente en muchos aspectos y que la tecnología se aprovecha de esta circunstancia.
Y por otra, lograremos lo que se consideraba hasta ahora que no tenía ningún valor: Escribir “palabras en el aire”. Me explico; esta técnica consiste en firmar en el aire a la vez que sostenemos el teléfono móvil. Tiene que ver con nuestra forma de mover la mano cuando firmamos: Las aceleraciones que se producen en cada eje durante la firma.
¿Con qué compara? Con otra firma hecha antes y que el usuario ha tenido que realizar tres veces… por si acaso. Lo interesante es que esa “firma” puede ser la misma que hacemos manuscrita (es decir, la firma que hacemos normalmente con nuestro nombre) o un gesto que el usuario repita. Así que habrá que escogerlo con cuidado, no vaya a ser que se nos olvide y terminemos agitando la mano convulsivamente delante del móvil intentando que nos reconozca…
¿Qué más hace qué esta firma sea única? También la forma en la que se sujeta el teléfono mientras se hace: Largo del brazo, tamaño de la mano, orientación del móvil, el giro de nuestra muñeca…
En un tema tan importante como el comercio electrónico, que moverá cientos de millones de euros y de dólares, no hay eso de “solo para Android” o solo para “Iphone”; así que las dos técnicas se han desarrollado para los dos tipos de dispositivos móviles e imagino que para el futuro también para el resto.
Ventaja de este sistema: El proceso de autentificación no necesita enviar la información a un servidor para comprobarla; se realiza en el mismo móvil. Así se garantiza que esa información (las fotos de las manos, por ejemplo) siga siendo privada. Y para la firma ¡no se necesita lápiz! Ni mirar a la pantalla.
Desde luego los móviles están cambiando nuestro comportamiento. ¿Recordáis cuando hace unos años parecía que algunos se habían vuelto locos hablando aparentemente solos por la calle, porque ya no se necesitaba llevar el móvil pegado a la oreja?
Pues ahora parece que nos toca dibujar palabras en el aire para que nuestro dispositivo inteligente nos acepte como sus dueños y no nos vea como ladrones y así nos permita realizar pagos.
Link: Dos técnicas biométricas autentican la identidad de los usuarios móviles (Facultad de Informática, Universidad Politécnica de Madrid)