Su sistema operativo basado en Linux y su naturaleza híbrida hacen que el Nokia N900 tenga un hueco en muchos corazones de los hackers.
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Es el caso del polaco Emeryth, que rebelándose contra la obsolescencia programada que rige fatua el destino de nuestros gadgets, ha decidido convertir al dispositivo si no en la plataforma de juegos móviles más puntera si uno de las más estilosas.
Con un gamepad entre cyber y steampunk acoplado vía USB al Nokia, ahora podemos pasarnos horas jugando en sus viejos arcades emulados gracias a sus ocho botones dedicados y un joystick analógico. Un aplauso, por favor.
El hacker ha empleado como base un placa de microcontrol ATmega8A. Y por si fuera poco el terminal corre ahora con un arranque dual de sistema operativo, incluyendo Android 4.0 Ice Cream Sandwich. Un prodigio como veréis:
Link: Nokia N900 gamepad hack dispenses with beauty, sidles up to sore thumbs (video)
