En noviembre del año pasado, la aduana de Valencia retuvo — por órdenes de Apple — una partida importante de tabletas que la empresa de esa ciudad española Nuevas Tecnologías y Energías Catalá S.L estaba importando desde China con marca propia, llamada NT-K.
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Eso porque según los de Cupertino la NT-K Pad A91 era una copia del iPad pues “reproducía en el propio dispositivo y/o embalaje diseños comunitarios registrados, cuya titularidad corresponde exclusivamente a Apple”.
La firma acusada se defendió argumentando que el software de su tablet era totalmente diferente, puesto que el sistema operativo utilizado es Android.
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Pues bien, hoy el titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Quart de Poblet, en Valencia, ha sobreseído la denuncia al entender que la perpetración de un delito no está debidamente justificada.
En 2010, además de ser retenida la partida de tablets NT-K Pad A91 en la aduana valenciana, NT-K fue incluida en una lista negra europea de empresas piratas.
Por si esto fuera poco, al ser bloqueadas las ventas de los tablets de la compañía valenciana tuvo un fuerte impacto económico, por lo que ésta ha presentado una demanda contra la estadounidense por “daños emergentes, lucro cesante y daños morales”, que se suma a la interpuesta en agosto por “abuso de posición de dominio”.
Para tener información de la demanda, además de la que se refiere a la configuración de hardware y software del NT-K Pad A91 pueden ver la nota publicada en el blog de NT-K. ¿Qué opinan de esta lucha entre David y Goliat?
Link: Foss Patents