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¡Barcelooooooooooona! Así cantaban a pleno pulmón el llorado Freddie Mercury y Montserrat Castafiore Caballé para celebrar la Olimpiada de la Ciudad Condal.
Ahora la metrópoli catalana tiene otra gran noticia que celebrar: volverá a ser la sede del Mobile World Congress hasta el 2018. Una decisión saludada por políticos y empresarios, conscientes del gran impacto positivo que para la economía local (estimado entre 3500 y 6000 millones de euros) tiene el congreso internacional dedicado a la telefonía móvil más importante del mundo.
Para que esto sea posible, y neutralizando los intereses de otras grandes urbes europeas que ansiaban ser sede del MWC, ha sido necesario convencer a sus organizadores del GSMA, que por lo visto han quedado encantados:
Todas las ciudades que compitieron por el título presentaron ofertas muy innovadoras y atractivas, pero al final, Barcelona demostró que verdaderamente se merece el título de Capital Mundial del Móvil, con su combinación de exposición excepcional e instalaciones para conferencias, su infraestructura de transporte y hostelería, su compromiso de ampliar el alcance de la movilidad en Barcelona, Cataluña y España, y el fuerte apoyo de los sectores públicos y privados.
Así, Barcelona se convierte en la capital mundial del mercado de la telefonía móvil. Enhorabuena y… a mejorar esa infame conexión a Internet dentro del recinto.
Link: Barcelona, capital mundial del móvil (El País)