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En Venezuela vivimos ciertas dificultades con el control de divisas y eso repercute en las importaciones, por lo cual Samsung se ha preparado, según anunció recientemente, para ensamblar sus equipos en el país suramericano en caso de que las importaciones de terminales listas empiecen a salir más costosas que las importaciones de piezas.
Así lo expresó Luis Cobo, vicepresidente de la División de Comunicaciones Móviles de esta compañía, durante el lanzamiento de la Samsung Galaxy Tab de 7 pulgadas y el teléfono inteligente Samsung Galaxy S.
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Y es que en Venezuela los inversionistas enfrentan un férreo control de divisas que hace que el Estado sea el único autorizado para decir a los comerciantes cuánto dinero en moneda extranjera pueden manejar en nuestro territorio. Esto hace que exista un mercado paralelo de reventa de dólares a precios muy por encima del oficial.
A su vez, el desorden con el tipo de cambio: personas y empresas comprando dólares en el mercado paralelo para tener más para negociar, impacta negativamente en las importaciones.
En Venezuela, actualmente, la demanda de casi cualquier producto (incluidos alimentos y medicinas) es bastante superior a la oferta y eso abre paso a perversiones tales como el abuso de precios en todas las categorías.
Lo que no queda claro con respecto a la voluntad de Samsung ensamblar en el país es si se trata de una previsión o ya es un plan pues, aunque se dice que esperan por una baja en el costo de importación de las piezas, mayormente provenientes de Corea, Cobo también comentó que el ensamblado en Venezuela “será cuando nos den (a Samsung) luz verde”.
¿Es esto buena noticia para los venezolanos? Sí.
Aunque pudiera pensarse que esta idea de Samsung surge como consecuencia negativa de las muchas trabas impuestas por el gobierno nacional entre los intentos por controlar la desvencijada economía local, la verdad es que el efecto inmediato sería positivo, pues la desarrolladora de móviles pasaría de 70 a 300 trabajadores directos e indirectos en nuestro país.
Esto demuestra, entre otras cosas, una fuerte voluntad de Samsung respecto a seguir invirtiendo en Venezuela. Además, se espera que el ensamblaje no se limite a los móviles, sino a cualquier otro equipo Samsung demandado en nuestro territorio.
Por cierto, ¿cuántos venezolanos hay por aquí, que hayan comprado a precios mayores de los originales o que hayan optado por mandar a comprar cosas en otros países, como Estados Unidos o Panamá?
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