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El planeta Zebes explotó (en mis libros) hace más de 15 años. A pesar de varias aventuras notables, de que pasó mucho tiempo y de que Samus hiciera mucho pilates -muy guapa ella-, la secuela oficial de Super Metroid estaba a la vuelta de la esquina. Así, después de mucho, llegó el día: gracias a Nintendo Chile teníamos en nuestro poder uno de los juegos más esperados del año.
De la mano de Nintendo y el equipo de Team Ninja (Ninja Gaiden, Dead or Alive) llega Metroid: Other M y el resultado es alentador.
Érase una vez en el espacio
La historia dice así: Samus, vagando por el espacio en su nave recibe una señal de auxilio – proveniente de la Nave Botella – que decide investigar. Llegando a ella se encontrará con un ambiente extraño, inquietante y hostil, además de toparse con gente de su pasado, pasando desde la figura materna que tuvo Samus en Super Metroid a una figura de amiga, rebelde e hija en este título. No quiero entregar muchos detalles acerca de la historia debido a que Other M es un juego altamente narrativo, un título que profundiza en la heroína, en qué vivió y cómo se transformó en cazarecompenzas. A través de hermosas secuencias en CG y flashbacks vemos el lado más emocional y privado que habita en la mente y corazón de doña Aran, siendo uno de los lados más poderosos y que dedicó más atención a la hora de desarrollar el juego. El objetivo, una versión moderna y muy nintendísta de la saga: una heroína, un equipo, una nave gigante, malotes, investigación, exploración, recolección de ítems y mucha acción. Como buen Metroid que es, a medida que se consigan más ítems, nuevos movimientos y ataques podremos acceder áreas nuevas (a las que nos era imposible llegar previamente) y recorrer por completo la Nave «Chuica«.
En el lugar de la cazarecompenzas
Una vez tomando el control, el asunto comienza muy bien. El simple hecho que utilice sólo el Wiimote y de manera lateral (cual control de NES) nos dice cuál es la misión tras Other M: el fan service. Algunos pueden verlo con frialdad y decir que hasta podría ser populista, la verdad es que el juego fluye con una extraña familiaridad. Tiene 2D, 2.5D, 3D, primera persona y su mezcla se siente natural, simple y amistosa: es Super Metroid, (en menor medida) es Metroid Prime y es su propia identidad y novedades; de todo eso sale Other M. Mientras controlamos a Samus en tercera persona, la cámara tiende a estar en el lugar correcto con vistas que a veces son isométricas (en perspectiva de ¾), otras ocasiones son de manera lateral, puede estar en la espalda de Samus o en primera persona al girar el Wiimote apuntando a la pantalla, lo que nos permite apuntar con precisión a enemigos o explorar el escenario en busca de ítems o compuertas.
Visualmente, Other M es uno de los juegos con mejores gráficos para Wii. Sí, sí… 480p, bla, bla bla… el juego luce hermoso, demuestra que la consola de Nintendo tiene cosas que decir a nivel visual y su motor gráfico sólo sufre mínimos y muy esporádicos percances. Los controles son simples, generalmente precisos (la transición cruz/2D a 2,5D es inmejorable) y rara vez se transforman en un problema en el desarrollo del juego; de hecho, su limitado número de botones simplifica la tarea de utilizar armas y habilidades clásicas como los misiles, la morph ball, el ice beam, el screw attack, movimientos de remate a los enemigos bastante hardcore y más. El audio cumple, con actuaciones que deambulan entre lo correcto y lo cursi (pero que jamás son un inconveniente) y rescatando tonadas clásicas de la saga. El juego luce por sí mismo y tiene para ofrecer entre unas 10 a 15 horas de acción metroidanense.
Lamentablemente -y como todo juego- Other M no es perfecto. Su narrativa es rica y si te engancha puede resultar altamente gratificante (sobretodo a los más fans de la saga)… el problema es que tiende a abusar: algunas escenas son muy largas, no se pueden adelantar al menos que ya las hayas visto y si la historia no te importa – y sólo quieres matar bichos y coleccionar ítems – puede llegar a entorpecer el ritmo y el desarrollo fluido del juego (y quizás incluso asustar a novatos en el mundo Metroid). Se nota que fue escrito y dirigido en Japón: tiene narración de anime, donde la verborrea excesiva no es un ‘pero’ y donde las frases largas y obvias son pan de cada día.
La cámara puede traer problemas: sucede en contadas ocasiones, pero habrá momentos en que Samus quedará a contramano y el ángulo no nos permitirá ver claramente dónde están los enemigos. Cuando estamos en 1era persona no nos podemos mover, haciendo de Samus una presa fácil de atacar, además que a veces el sistema de «blanco automático» nos puede jugar alguna mala pasada y ciertos saltos o movimientos no saldrán a la primera a pesar de que jurábamos que lo habíamos hecho tal y cómo era necesario – más de alguien extrañará su Nunchuk.
Extrañamente no tiene menú de opciones (lo que ves es lo que hay) y tal vez para algunos – siempre los hay – no habrán incentivos una vez terminado el juego, aunque con la película de 2 horas y la segunda visita a la Nave Lata de Gaseosa hay bastante por hacer, suponiendo que el juego lo terminamos en un 100%. Finalmente la música tiene un par de tonadas que suenan raras, remixes de temas viejos que suenan algo forzados y que, si bien la música es buena, queda algo corta comparándola con la maravillosa OST de Super Metroid (tratar de superarla ya era una tarea titánica).
Quien crea que todos esos ‘peros’ entorpecen al resultado final, se equivoca; fuera de las observaciones anteriores brilla un juego que está hecho en justa medida para los fans de la saga: armas conocidas, rostros familiares (humanos y no humanos), tonadas clásicas, una formula de exploración y acción comprobada, una historia interesante (con un par de atractivas vueltas de tuerca), una dificultad ideal tanto para fans como para novatos (por eso mismo creo es la simplicidad de los controles) y notables y variados combates con jefes… Todo esto arma un juego que roza la idealización de la receta de Super Metroid con los estándares de los juegos de hoy y que sin dudas holgadamente con cumple con las expectativas.
Raya para la suma
Tal vez los jugadores más jóvenes y quienes recién harán sus artes en esta saga no disfruten o valoren el brillo real que radica en Metroid: Other M. Los veteranos verán ese carisma que sólo entrega la nostalgia más lo actual, con un título muy bien logrado que contó con un gran desempeño y comunicación entre Nintendo y Team Ninja; un juego sólido que merece llamarse Metroid por todos lados.
Lo imperdible:
- Excelentes gráficas y atención a los detalles.
- Épicas batallas contra los jefes.
- Original implementación de un modo de juego ya clásico.
- Gran atmósfera y uso de la nostalgia.
Lo impresentable:
- No se pueden adelantar las cinemáticas.
- Está tan bien armado que se hace corto.
Notable …roza la idealización de la receta de Super Metroid con los estándares de los juegos de hoy.