Los jugadores de PC no son los únicos molestos con las «novedades» de Modern Warfare 2, ya que ahora también han surgido desacuerdos con importantes medios de distribución digital.
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Comenzamos con el servicio Direct2Drive de IGN, quienes han decidido no vender Modern Warfare 2 sin importar el hecho de que podrían perderse las ganancias generadas por este título. Y no, este movimiento no es en protesta por el asunto de los servidores dedicados ni por el recorte en la cantidad de jugadores en el apartado multiplayer, sino que todo se debe a que el juego está basado en Steamworks para actualizaciones y logros, por lo que la gente detrás de D2D no está muy emocionada con vender un título que incluye un producto de la competencia, dejando en claro que no quieren que sus clientes se vean forzados a instalar software de una compañía third party.
Esta medida drástica también está siendo tomada por otros servicios como Impulse y GamersGate, quienes presentan el mismo argumento del problema de incluir Steam en conjunto con el juego. Ahora, la pregunta obligada es: ¿es este en realidad el motivo o habrá algo más personal de por medio? Y lo digo porque D2D y GamersGate actualmente venden otros títulos con Steam, incluyendo Zeno Clash.
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Ya veremos cómo reacciona Activision ante esta situación, aunque suponemos que no harán cambio alguno considerando que su presidente Mike Griffith acaba de declarar que no les preocupa mucho todo el alboroto que se ha armado alrededor de la versión para PC de Modern Warfare 2, ya que considera que se está tratando de mejorar la experiencia del consumidor y no lo contrario como la comunidad lo ha venido expresando.
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