(cc) Alfonso Jimenez
En un esfuerzo por decretar medidas antipopulares, se discutió por meses en la Unión Europea la posibilidad de instituir un tributo especial, un impuesto que gravara a los móviles que tuviesen funciones como receptor GPS o sintonizador de televisión.
Esta tasa fluctuaría entre un 3,7 y un 14% del costo del dispositivo. Lo que tenía procupado tanto a usuarios que verían incrementados los precios, fabricantes que verían disminuidas las ventas y operadoras, que encontrarían problemas para seguir expandiendo el mercado y con los cambios desde equipos básicos a smartphones (que suelen conllevar la contratación de planes de datos).
Afortunadamente, al igual que con el porno-impuesto, esto ha quedado en nada y por un tiempo nos hemos salvado de otro abuso acto de autoridad pernicioso para nuestros bolsillos.
Link: EU scraps plan to tax phones with GPS, TV (Electronista)