No hace mucho tiempo desde que se estrenó en el mercado la serie 700 de chipsets de la mano de AMD. Dentro de esta serie podemos encontrar los chipsets 780G y 790GX, que tienen algo en común que supone un verdadero hito en la historia de los gráficos integrados: se trata del Sideport, un módulo de memoria dedicado exclusivamente para el funcionamiento del IGP. Los resultados de esta innovadora solución no se hicieron esperar, poniendo a los IGPs de su competencia directa en graves aprietos.
El día de hoy tenemos el placer de traer ante ustedes, de la mano de Foxconn, una placa madre a todo ritmo, que luce con orgullo el flamante chipset 790GX: la A7DA-S.
Dentro de los chiches que nos ofrece esta modesta-pero-no-tanto placa, se encuentra la capacidad de establecer una configuración CrossFireX con 2 tarjetas discretas; o bien, una configuración Hybrid CrossFireX entre el procesador gráfico integrado y VGAs de la serie HD 24xx o HD 34xx; o por último, si tu presupuesto no alcanzó para más, puedes correr tus juegos favoritos con la VGA integrada, que ofrece un rendimiento bastante potable y te permite conectarla incluso a tu monitor de alta definición sin necesidad de ningún tipo de adaptador.
Luego de esta austera introducción, los invitamos cordialmente a leer la siguiente revisión, hecha con el sudor de nuestra frente.