En esta ocasión compararemos tres placas madres integradas compatibles con procesadores Intel, que poseen tres distintos enfoques a un mismo problema. Hoy verán lo ultimo en la oferta de gráficos integrados, desde placas madres sumamente económicas hasta una estrella con DVI y HDMI.
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En el pasado las placas madres con vídeo integrado eran sinónimo de baja calidad en el inconsciente colectivo. Hoy los tiempos han cambiado y la oferta no solo es mayor, sino ademas se han incorporado nuevos jugadores a la escena, compañías que no vienen del mundo de los chipsets como tal, sino del área gráfica, como NVIDIA y ATi.
Hoy veremos tres placas madres que poseen tres cosas en común, poseen gráficos integrados, soportan procesadores Intel y son de formato microATX. Estas tres capacidades las hacen ideales para escenarios que no involucren un uso avanzado de videojuegos, pero que por otro lado, y gracias a su pequeño tamaño, permiten su uso en gabinetes más portatiles y estéticos.
Porque claro, puede que con una de estas placas madres no armes un gran computador para videojuegos y no corras Crysis, pero sirven para un gran numero de equipos muy interesantes, como por ejemplo sistemas para conectar a televisores de alta definición.