Recientemente, astrónomos de la NASA descubrieron una señal inexplicable proveniente del exterior de la Vía Láctea, lo que inmediatamente generó un notable interés en el mundo científico.
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Este hallazgo, publicado en The Astrophysical Journal Letters, fue realizado con el telescopio espacial de rayos gamma Fermi, que analizó datos recopilados durante 13 años.
Alexander Kashlinsky, cosmólogo de la Universidad de Maryland, describió el descubrimiento como “serendípico”, destacando que la señal era más fuerte y provenía de una parte diferente del cielo de la que inicialmente buscaban.
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¿De qué se trató la señal captada por la NASA?
Los investigadores identificaron “dipolos” de rayos gamma, lo que consiste en dos polos eléctricos o magnéticos opuestos, muy próximos entre sí.
Pero lo curioso del hallazgo reside en que el equipo originalmente estaba investigando rayos gamma relacionados con el Fondo Cósmico de Microondas (CMB), la luz más antigua del universo y que fue descubierta en 1965.
Al respecto, Chris Shrader, astrofísico de la Universidad Católica de América en Washington y coautor del estudio, señaló que la señal de rayos gamma recién encontrada estaría situada en el cielo meridional, lejos de los CMB, y su magnitud sería diez veces mayor de lo esperado.
Vida extraterrestre
A pesar de los rumores que este hallazgo despertó, los investigadores descartaron que las señales tengan relación con vida extraterrestre.
En lugar de ello, el foco de interés radica en la posibilidad de encontrar relaciones entre diferentes señales magnéticas detectadas fuera de nuestra galaxia.
La tecnología de detección de rayos gamma permite observar explosiones de luz extremadamente brillantes, pero aún queda mucho por investigar para comprender completamente la naturaleza y origen de estas señales.
Con todo, para la próxima fase de esta investigación se espera que los avances tecnológicos en la detección de rayos gamma brinden más claridad y permitan entender mejor estos fenómenos.
Si bien la pregunta de cómo se producen estas señales sigue siendo un misterio para la comunidad científica, existen diferentes métodos desarrollados para descubrirlo más pronto que tarde.