Los resultados de una investigación policial de 2013 en São Paulo, Brasil, determinó el descubrimiento de un fósil que proviene de un pterosaurio, “excepcionalmente bien conservado y casi completo”, según un estudio recientemente publicado por el Laboratorio de Paleontología Sistemática del Instituto de Geociencias en la Universidad de São Paulo en la revista científica PLOS One.
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El esqueleto corresponde a un tapejarido, un reptil desdentado que vivió hace unos 115 millones de años en el período Cretácico Inferior y está completo en más del 90 por ciento. Los restos también incluyen una “conservación notable de los tejidos blandos, lo que lo convierte en el tapejarido más completo conocido hasta ahora”, escribieron los autores en el estudio.
El pterosaurio fosilizado pertenece a la especie Tupandactylus navigans.
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La investigación policial que dio con el fósil
Víctor Beccari, el autor principal del estudio, explicó a CNN en qué consistió la investigación policial que dio con los restos del pterosaurio y con otros 3.000 fósiles, trasladados a la Universidad de São Paulo para analizarlos: «La Policía Federal de Brasil estaba investigando una operación de comercio de fósiles y recuperó, en 2013, más de 3.000 especímenes«.
«El espécimen fue descubierto durante una redada policial en el puerto de Santos, estado de São Paulo, Brasil, y confiscado junto con varios otros fósiles excepcionalmente bien conservados”, expresó el especialista.
Beccari puntualizó que los fósiles están protegidos legalmente, luego de la promulgación en 1942 de una ley en Brasil establece que los fósiles son propiedad del estado porque son parte del patrimonio cultural del país y no se pueden vender comercialmente.
«Los fósiles en Brasil están protegidos por la ley, ya que son parte del patrimonio geológico del país. Por lo tanto, la recolección de fósiles requiere permiso, y el comercio y las colecciones privadas de fósiles son ilegales en Brasil«, insistió Beccari.
La descripción del fósil de pterosaurio
El fósil tapejarido se encontró originalmente en la Formación Crato en la cuenca de Araripe en el noreste de Brasil. Este tapejarido en particular tenía una envergadura estimada de casi 9 pies (2,7 m) y tenía casi 3 pies (1 m) de altura, y la cresta representaba el 40 por ciento de eso.
“Con una cresta de cabeza tan alta y un cuello relativamente largo, este animal puede haber estado restringido a vuelos de corta distancia”, dijo Beccari a CNN.
En julio, un estudio realizado por las universidades de Portsmouth y Bristol encontró que los pterosaurios recién nacidos pueden haber podido volar.
Los pterosaurios eran reptiles que dominaban los cielos en los períodos Jurásico y Cretácico. Los científicos han debatido durante mucho tiempo dónde encajan los pterosaurios en el árbol evolutivo. Evolucionaron a decenas de especies. Algunos eran tan grandes como un avión de combate F-16, otros tan pequeños como un gorrión y fueron los primeros animales después de los insectos en desarrollar un vuelo motorizado.
Curiosamente, a principios de agosto de este año, los investigadores descubrieron otro pterosaurio, Thapunngaka shawi, que tenía una envergadura de 23 pies y era “lo más parecido que tenemos a un dragón de la vida real”.