Cuando algún político estadounidense diga que las filtraciones de Edward Snowden no han tenido mucha repercusión, quizá no en el ámbito de su Guerra contra el terror que tienen en gran parte del mundo, pero sin duda las filtraciones de Snowden han tenido una gran repercusión en grandes empresas de EE.UU.
Verizon es una de esas grandes operadoras que se oponen a la neutralidad de la red, no hay nada de malo ya que cada empresa puede tener su propia opinión sobre un asunto como este, pero Verizon ha estado involucrada en el espionaje y monitorización de personas en países que no son EE.UU. mediante ordenes de la NSA.
Esto les ha costado un gran contrato a nivel institucional con el gobierno de Alemania. El gobierno alemán ha decidido prescindir de los tratos de Verizon como empresa de redes e infraestructura tras los escándalos de espionaje a la misma Canciller alemana Angela Merkel.
Quien se beneficia de todas estas filtraciones son las empresas Europeas, en esta ocasión T-Mobile que se hará cargo de las comunicaciones que deja Verizon. Pero es otro ejemplo de como el espionaje de la NSA que hasta ahora se conoce, le está costando mucho dinero a grandes empresas de EE.UU., quizá no por usuarios normales, pero si en grandes empresas que no quieren que sus datos sean visibles por otros gobiernos.
La nota publicada por el Ministerio del Interior Alemán comenta la decisión tomada tras considerar la implicación de Verizon con NSA y la fragilidad de las comunicaciones ante infecciones de troyanos.
¿Cuánto dinero ha costado la filtración de lo que la NSA ha estado haciendo durante años a EE.UU.? Sería un cálculo interesante, pero más allá del dinero, el nombre de grandes empresas como Verizon o la misma BT en Europa nunca será lo mismo.
