La Federal Communications Commision, también conocida como FCC, define que un servicio de “banda ancha” comienza con velocidades de descarga de 4 Mbps. Sin embargo, esa definición podría cambiar en el futuro y poner como piso mínimo velocidades mucho mayores.
El reporte del Washington Post indica que la FCC está considerando modificar la definición y que la “banda ancha” comience desde los 10 Mbps. La cifra no está escrita en piedra aún, y se cree también que la apuesta podría ser incluso más alta y llegar hasta 25 Mbps; la decisión se tomará en base a una “consulta pública” que se está actualmente preparando.
¿Por qué la FCC querría cambiar la definición? Principalmente, porque el uso de la internet a nivel de hogar ha cambiado. Con la proliferación de los servicios por streaming y similares, lo que a día de hoy se considera como “banda ancha” en algunos casos no es suficiente para tareas que poco a poco se están volviendo coloquiales.
En Estados Unidos esto cobra bastante lógica tomando en cuenta que servicios tipo Hulu, Netflix, Spotify o similares tienen una adopción muy alta; con las mejoras en el formato y la calidad del contenido, los requerimientos han sido subiendo. Y como la FCC tiene la autoridad para realizar este tipo de cambios, simplemente lo harán (o lo intentarán hacer).
Eso sí, algo tan simple como una definición podría acarrear cambios más grandes y que tal vez no sean del total gusto de las operadoras que existen actualmente. De partida, si la definición determina que 10 Mbps es el mínimo, todo los planes de menor velocidad que se ofrezcan como “banda ancha” quedarán simplemente como publicidad engañosa.
Y por supuesto, todo esto cae justo en medio de la discusión entre la FCC y otros actores por la neutralidad en la red que se lleva a cabo en el pais norteamericano.
