La Unión Europea estaría desarrollando en secreto un sistema que en la próxima década pueda ser capaz de detener cualquier automóvil a distancia sin limitación alguna. Aunque es sabido que esta tecnología existe y es administrada por las compañías automotrices, en la Unión Europea se impondría un estándar y sin importar quién fabrique el vehículo.
Su desarrollo está destinado a facilitar la detención del automóvil por parte de la policía, pero se ha encontrado con opiniones negativas cuestionando la privacidad y libertad de conductores que respetan la ley. Entre otras opiniones, la responsabilidad al usar este sistema debe ser una prioridad, ya que puede suponer un gran riesgo si llega a las manos equivocadas, pues podría provocar accidentes automovilísticos en autopistas de alta velocidad, por sólo mencionar un ejemplo.
La tecnología está siendo desarrollada por orden de las autoridades, sin valerse de un consenso poblacional, ya que además de la privacidad, la libertad está siendo invadida sin mayor esfuerzo que una orden de ingeniería que llevaría al menos 10 años en imponerse tan sólo en la Unión Europea. Podríamos imaginar que el conductor no pudiese tomar el vehículo sin sentirse vigilado.
Link: The Telegraph (vía The Verge)
