Si tomamos en cuenta su potencial, México es el principal mercado hispano del planeta. Aun cuando su PIB es un 20% menor al de España, mientras esté último esta en recesión, la economía de México crece a paso firme y al doble de velocidad que el resto del mundo.
Internet también va en aumento y es una industria que está madurando rápidamente. Donde algunos ven en un 30% de penetración un desastre, para los optimistas, casi 40 millones de personas conectadas es solo el inicio de un mercado que se desarrollará plenamente y que se espera llegue a más de 50 millones para el próximo año.
El ecosistema de emprendimiento ya está. México tiene una de las IAB – el gremio que reúne a anunciantes y medios digitales en internet – más activos del planeta, también tiene iniciativas de financiamiento como Mexican.VC, fondos de inversión por USD$400 millones y organizaciones como Startup Weekend, que entrenan durante un fin de semana a muchachos para crear productos mínimamente viables que les permitan acercarse al día a día de un emprendimiento en internet.
El talento también existe. Tienen las mejores universidades de hispanoamérica ,algunas prácticamente gratuitas, varias de ellas con programas de emprendimiento e innovación. Están los mejores profesionales del mundo de las artes visuales y los ingenieros son tratados como una casta mayor. Mientras que en el pasado, las multinacionales manejaban sus operaciones latinas desde Miami, cada vez más están optando a México como su hogar.
Si consideramos todo esto y le sumamos su privilegiada posición geográfica – a 12 horas de Asia / Europa y a 2 o 3 de Estados Unidos – la combinación es virtuosa: educación y financiamiento.
Fuentes: Wikipedia, Internet World Stats
Pero no todo es perfecto. Mientras que en Buenos Aires, Santiago y Lima puedes fácilmente tener cuatro reuniones en un día, en Ciudad de México, la octava área metropolitana más rica del planeta, con suerte llegas a dos juntas gracias a su infame tráfico. Cuando en Colombia dar de alta una empresa es relativamente fácil, en México es una odisea. Ni hablar de las leyes laborales, donde el costo empresa de un empleado es prácticamente un 50% más de lo que percibe en su bolsillo o que el sistema tributario esta tan podrido que a pocos les da vergüenza confesar que hace negocios negros, sin factura y en billetes. En un país donde los robos por parte de la clase política son pan de cada día, robarle al estado no pareciera ser una gran falta.
Y puedo seguir: las tasas de interés son de locos, un tercio de los internautas mexicanos no usa el comercio electrónico, la guerra contra el narco parece ser el foco único del gobierno de turno y hay un percepción generalizada de desconfianza hacia las instituciones públicas y privadas.
Pero la gran mayoría de México es optimista, son personas abiertas a nuevas culturas y que disfruta no solo de trabajar, sino sobre todo a pasarlo bien. Gente creativa, que respeta su pasado pero que no le hace el asco a rescatar lo mejor del resto del planeta. Un país que adopta rápidamente las tendencias globales, pero que aun esta en deuda con los usuarios de internet.
Estoy seguro que en los próximos años veremos una gran compañía de internet mexicana abrirse a la bolsa con bombos y platillos. El ecosistema está, los desafíos fiscales son pequeños al lado de hacer de un startup una empresa rentable (independiente de su lugar de operación) y Ciudad de México, el epicentro del país, se esta transformando en un destino favorito entre los inmigrantes profesionales.
Mientras que Argentina tiene el track record de emprendedores más positivo de la región, Chile tiene el apoyo al emprendimiento como parte de su agenda gubernamental y Colombia tienen los mejores desarrolladores de la región, en México viven 112 millones de personas, más que la suma de los tres otros países juntos y esto, sumado a que competitivamente no tienen nada que envidiarle a sus vecinos, hace a Tequila Valley el lugar más atractivo para emprender en internet hoy por hoy.
