Spidey en acción (foto de cámara de seguridad)
No es la trama de una historieta ni un cross-over raro. Sucedió de verdad en Australia el sábado, cuando Spiderman detuvo a un ladrón mientras dos caballeros Jedi le bloqueaban el paso al maleante.
En realidad, Spiderman era el dueño de la tienda de cómics, que estaba celebrando el Día Internacional del Cómic y tenía en su local a unas 40 personas disfrazadas de sus superhéroes favoritos. De pronto, su sentido arácnido le alertó respecto de una persona comportándose extraño al final de la tienda. El malhechor estaba metiendo en su bolso un ejemplar de X-Men que costaba nada menos que US$160.
Así que partió raudamente a través de los pasillos a detener al sujeto, que después de resistirse un poco, no le quedó más que someterse al poder de la Fuerza y devolver el cómic, viéndose rodeado por jedis y otros superhéroes.
“Todos en la tienda pensaron que era un show, como teatro callejero o algo así. No fue hasta que dije ‘llamen a la policía’ que la gente empezó a darse cuenta”, relató el dueño de la tienda, Michael Baulderstone.
“Fue una situación muy seria en el momento, pero ahora nos reímos de lo que la policía tiene que haber visto cuando llegó”, explicó al periódico Courier Mail, contando que en un momento mientras detenía al ladrón pidió que la gente bloqueara la salida, y sucedió que quienes se pararon en la entrada fueron dos Jedi y un sujeto vestido de Flash.
Link: The best arrest ever, starring Spider-man, Jedi and the Flash (Courier Mail)
